“AMLO en riesgo por edad, hipertensión, cardiopatías, y no se cuida…”

Especial

El Presidente pidió una tregua, pero mantuvo su retórica de polarización. Todo se lo endilga a los conservadores y al neoliberalismo. Hasta sus propios errores.

Ayer llegó al extremo de presumir el sistema de salud que había antes de la irrupción del COVID-19.

“Antes del coronavirus se había creado el Instituto de Salud para el Bienestar; antes del coronavirus ya habíamos decidido aumentar el presupuesto del sector salud en 40 mil millones de pesos.

“Antes del coronavirus habíamos definido cuatro acciones: que no faltaran los medicamentos, que no faltaran los médicos, que se mejoraran las instalaciones y que se le diera atención especial a los trabajadores de la salud”.

No alcanzo a imaginar lo que piensan los padres de niños con cáncer que tuvieron que tomar el aeropuerto por la falta de medicamentos para sus hijos.

Los enfermos de sida que tuvieron que salir a la calle por idéntica razón; los que padecen insuficiencia renal y rogaban por su diálisis.

O los familiares de los fallecidos en el hospital de Pemex, en Villahermosa, porque les pusieron un medicamento contaminado.

Todo eso también era antes del coronavirus.

¿Se habrá olvidado de las palabras del ahora senador de Morena, Germán Martínez, cuando renunció a la dirección del Seguro Social, en mayo pasado?

“En el IMSS, algunas injerencias de Hacienda son de esencia neoliberal: ahorro y más ahorro, recortes de personal y más recortes de personal, y un rediseño institucional donde importa más el ‘cargo’ que el ‘encargo’”, puntualizó.

* Ya que estamos. Nos escribió el cardiólogo Elías Moreno Brizuela, exsecretario de Protección Civil en la CDMX durante el gobierno de Marcelo Ebrard. Quería dejar claro que la salud del Presidente es un asunto de seguridad nacional.

En tono crítico, señaló:

“Las acciones y declaraciones públicas (del Presidente) contradicen, especifican y dan poca importancia a las indicaciones que su gobierno realiza para pedir a la población resguardo voluntario en casa y la sana distancia entre personas…

Andrés Manuel minimiza el riesgo de terminar infectado y, con ello, confunde la realidad, lo cual, además del mensaje equivocado al pueblo, hay que predicar con el ejemplo”.

Moreno Brizuela se pone en el supuesto de que AMLO se contagie. Hace notar que, por su edad, su hipertensión, sus problemas cardiacos “y un posible enfisema pulmonar”, por haber sido fumador durante muchos años de su vida, lo pone en situación de vulnerabilidad.

“Los riesgos no los esquivará con amuletos, imágenes religiosas o con la fortaleza moral que le abonó el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell”, asevera.

Dijo más: “Su ausencia por enfermedad generaría una grave crisis nacional. Por seguridad nacional, a la primera persona que se tiene que poner a salvo en algún búnker es al Presidente de la República para que, desde allí, atienda la crisis”. Pero AMLO ni suda ni se acongoja. Va mañana a Tlaxiaco, directo a un hospital. Viernes y sábado va a recorrer más  hospitales que se van a destinar a la atención de enfermos de coronavirus.

* Un demoledor tuit subió ayer a la red Mariana Moguel, la hija única de Rosario Robles. Alude, con ironía, al saludo de mano del presidente a la mamá del Chapo Guzmán: “Presidente@LopezObrador. Yo también le he enviado cartas y solicitado audiencias, sin embargo, no he obtenido respuesta. ¿Acaso debo ser familiar de Joaquín Guzmán Loera “El Chapo” para que me reciba?”.

Sin comentarios.

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* Cierro con algo que vale la pena destacar. El gobierno izquierdista de Portugal aprobó un proyecto que legaliza a los inmigrantes sin papeles, como medida de solidaridad ante la epidemia que cambió nuestras vidas. De este modo, los extranjeros tendrán acceso a todos los servicios públicos, incluidos el Servicio Nacional de Salud y las ayudas sociales.

Los beneficiados serán quienes hayan solicitado la residencia al Servicio de Extranjeros y Fronteras, incluidos los solicitantes de asilo, hasta el 18 de marzo, día de la declaración del Estado de Emergencia Nacional en Portugal.

Me pongo de pie.