La Fiscalía General de la República (FGR) presentó el día de ayer una acusación formal en contra de Rosario Robles, exfuncionaria del gobierno de Enrique Peña Nieto; solicitó una sentencia de 21 años de prisión por su omisión ante el desvío por más de 5 MMDP en el caso de la Estafa Maestra.
De acuerdo con el diario Reforma, la Fiscalía hizo la petición formal en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur donde acusó a la exfuncionaria de dos cargos por el delito del ejercicio ilícito del servicio público, delito sancionado con hasta 7 años de cárcel; uno por la afectación ocasionada a la Sedesol, del 1 de diciembre de 2012 al 26 de agosto de 2015, y otro por la causada en la Sedatu, del 27 de agosto de 2015 al 30 de noviembre de 2018.
Según el diario, la FGR argumentó que Robles cometió este delito de manera continuada, lo que implica una agravante que aumenta la sanción con la mitad de la pena máxima, es decir, 3 años y medio por cada delito, de los que resultan otros 7 años de prisión.
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El caso llama mucho la atención cuando es similar de culpa con el del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, quien actualmente se encuentra gozando de todas las comodidades del mundo porque se ha vuelto el soplón favorito del presidente de la República.
Lo contrario a Rosario Robles, que ahora es sentenciada a 21 años a la sombra, sólo porque no se ha dejado chantajear por el gobierno.
Hay que aclarar que no es cuestión de defender un caso de otro, porque ambos han resultado culpables, sino señalar la doble moral de la injusticia de la 4T.
AIS
