La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) suspendió y procedió penalmente contra cinco de sus funcionarios quienes habrían incurrido en el ejercicio ilegal del servicio público y negación atención en el caso de la niña Fátima, quien fue asesinada a principios de este año.
Se trata de cuatro servidores públicos (policías de investigación y un funcionario de la institución) y un agente del Ministerio Público quienes están acusados de no atender la búsqueda de la pequeña de siete años de edad, sino hasta 72 horas después de su desaparición reportada en febrero.
El primer funcionario involucrado identificado como Delfino Javier N, quien laboraba en la Fiscalía de Investigación Territorial en Tláhuac, y que posiblemente atendió indebidamente y con retraso a la madre de la menor la remitió a la Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas (FIPEDE).
Por su parte, el agente del Ministerio Público titular en turno, Édgar Emilio Vázquez Burguette, probablemente tardó más de ocho horas en iniciar la carpeta de investigación por la desaparición de la menor.
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En tanto, la agente de la Policía de Investigación, Liliana Peña Trujillo, quien recibió los oficios tendientes a la localización de la menor, no los entregó para iniciar la búsqueda.
Mientras que el PDI, Ramón Ramírez Bermúdez, posiblemente llevó a cabo una investigación deficiente, y su compañero Fidel Segura Rosas, expolicía de investigación, aparentemente retardó la indagatoria.
Los cuatro servidores fueron separados temporalmente de sus cargos como medida preventiva cautelar y el quinto debe presentarse a firmar de manera periódica y no puede acercarse a la Fiscalía de Desaparecidos; hasta ahora, ninguno de ellos está en el reclusorio.
Con información de Proceso y El Sol de México
MSA
