Desde 2007 el padre, Alejandro Solalinde, decidió apoyar los migrantes que intentaban llegar a Estados Unidos por medio del tren conocido como la “Bestia”, en consecuencia fundó el albergue Hermanos en el Camino, en Ciudad Ixtepec, Oaxaca.
Sin embargo, desde que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump ordenó a su homólogo, Andrés Manuel López Obrador, detener el flujo migratorio hacia lo frontera norte de México, la perspectiva del prelado cambió.
En ese sentido, Solalinde Guerra —en entrevista para el medio digital ElFaro.net— aseveró que “ya no es posible acompañar a los indocumentados centromamericanos en su empeño de llegar Estados Unidos”.
Para el también activista esta nueva mirada se debe a que “es momento de cerrar filas alrededor del gobierno de México y evitar a toda costa que la migración se convierta en un problema diplomático para la administración de López Obrador”.
Es una pena que la “Cuarta Transformación” haya repercutido de esta manera en Alejandro Solalinde, mismo que soportó tanto por defender a los indocumentados; pero lo realmente lamentable es que lo haga por López Obrador, en consecuencia traicionó, no solo a los migrantes, también a los mexicanos.
Con información de Proceso