¿QUÉ HACES CuANDO NADIE TE MIRA?

Son nuestras acciones (u omisiones) las que reflejan el compromiso que tenemos con nuestros valores

Intro: “La grandeza de un hombre no está en la riqueza que puede acumular, sino en su integridad y su capacidad de influenciar positivamente a quienes se encuentran a su alrededor” Bob Marley
Una amiga contaba que su abuela le daba mucha importancia a las modales. Comer bien en la mesa, era algo muy importante para ella. Se esmeraba en poner los platos y los cubiertos en orden y siempre alguna flor.
Un día llego a visitarla en domingo, y la encontró sentada en la mesa comiendo con toda corrección y unas margaritas sobre la mesa. No había nadie más en su casa, pero ella, era fiel a sus creencias hasta cuando estaba sola. Verla ahí sentada comiendo en soledad con la misma corrección que si estuviera rodeada de gente, la hizo entender lo que significaba ser una persona integra y congruente. Si bien siempre la había querido mucho, ese día comenzó a admirarla.
“Calidad significa hacer lo correcto cuando nadie está mirando” decía con razón, Henry Ford.  ¿Qué haríamos si atropellamos a alguien en una carretera solitaria? ¿Decidimos huir o dar la cara o ayudar? ¿Cómo vivimos de después de esa decisión?
Esa manera de actuar cuando no hay testigos, habla de quienes somos, de nuestros valores y nuestra calidad humana. No solo en los grandes momentos, sino en las pequeñas cosas de todos los días. Si sacas a pasear a tu perro, ¿eres responsable y limpias a pesar de que nadie esté ahí?
La integridad verdadera es hacer lo correcto, sabiendo que nadie se va a enterar si lo hiciste o no”, Oprah Winfrey.
Durante nuestra vida la mayoría de nuestras acciones son rutinarias. Nos aseamos, vestimos, preparamos nuestros alimentos, vamos a trabajar, dan una idea de nuestra personalidad pero no definen quienes somos. En cambio, hay otras que nos pintan de cuerpo entero. Podremos “decir” muchas sobre nosotros mismos, pero son nuestras acciones (u omisiones) las que reflejan el compromiso que tenemos con nuestros valores. Es el espíritu de la ética.
Cuando ya no estamos solos, la cosa cambia. Tratamos de dar nuestra mejor cara y nos comportamos de tal o cual manera dependiendo de la gente que está a nuestro alrededor.
Es poca la gente que expresa es fiel a sus convicciones sin importar quién esté a su alrededor o sigue viviendo como piensa aunque no haya nadie para atestiguarlo. Tratamos de adaptarnos al entorno, de ser aceptados, o de obtener un beneficio personal y en ese intento, nuestros valores pueden ser atropellados o traicionados.
Para muestra basta un botón.  Basta darse una vuelta en redes sociales y ver las maromas que han dado ante una misma situación. Los que pedían la renuncia de Enrique Peña Nieto por el plagio de una parte de su tesis, defienden o no dicen nada ante el caso de Yazmín Esquivel. Los que pedían que el ejercito estuviera fuera de las calles, ahora votan para que se queden. El dogmatismo hace que los que repudiaban una cosa, ahora la terminen aplaudiendo o viceversa.
Me despido deseándoles un buen domingo y con una pregunta ¿Tú que haces cuando nadie mira?
Me gustaría oír tu opinión. Deja por aquí un comentario o escribe a: [email protected] o en Twitter @FernandaT