¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Si yo estuviera en el lugar del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, comenzaría a preocuparme y trataría desde ahora, de dar un golpe de timón.

Y lo haría porque en el panorama, hay evidentes señales de que algo no anda bien. Veamos:

Para empezar, en el legislativo, la hoguera de las vanidades arde a todo lo que da; y nos recetó un sabrosísimo sainete protagonizado por Porfirio Muñoz Ledo y el impresentable Gerardo Fernández Noroña.

Obligado es reconocer, que Muñoz Ledo se vio sobrio, ecuánime y cuidadoso de respetar las formas y la ley. Por su parte, Fernández Noroña, se vió tal cual es.

Creo que esta par de personajes, nos depara muchos otros episodios pletóricos de diversión, que si no se desarrollasen en las cámaras donde se debaten asuntos tan relevantes para el país, serían de risa loca, mejor que cualquier programa de comedia.

Se comenta que el presidente electo tuvo que darles un buen tirón de orejas. A ver cuanto dura el efecto del correctivo.

Luego tenemos el caso de Diana Álvarez Maury, presunta pareja sentimental del conspicuo Alejandro Gertz Manero, que mintió al arrogarse un grado académico que no posee y que en cambio, ostenta en su currículum ser experta en el manejo de energías cósmicas.

Supongo que están pensando en llevarla a Gobernación para llenar la dependencia de buenas vibras, porque Olga Sánchez Cordero, ha de tener un aura muy pesada, dado el tipo de propuestas que planea impulsar.

Lo que es un hecho, es que mintió en lo referente a su estatus académico y eso transgrede el código lopezobradorista de no robar, no mentir y no traicionar al pueblo.

Curiosa se verá la futura subsecretaria, recetando terapias de reiki o cuarzos, a los quejosos en materia de derechos humanos.

Lo más sensato, sería buscar una mejor alternativa. Después de todo, la cuarta transformación descarta cualquier viso de amiguismo. ¿Verdad?

Ahora resulta que las pensiones a los ex presidentes siempre no se van a terminar. Se van a reducir, pero poquito. Ganarán lo que un secretario del gabinete.

Supongo que al presidente electo, le ganó el corazón y le dio pena que Fox y Calderón, se quedaran sin comer. Después de todo, su lema es amor y paz para todos.

Ya que hablamos de austeridad, en el senado por lo visto, les hizo mal. Después de un primer día a pan y agua casi, los senadores morenistas decidieron que no era para tanto y dijeron que siempre sí habrían botanas, comida y edecanes.

No saben lo felices que quedamos los mexicanos al saber que en el senado, la fiesta sigue.

Y resulta que supimos que los expertos mexicanos insisten tercamente en que Santa Lucía no es opción para el aeropuerto.

Por otro lado, juntar un aeródromo civil con otro de naturaleza militar, no parece muy correcto, por infinidad de razones. ¿Aún así deberá consultarse al pueblo sabio?

De Estados Unidos nos viene la noticia de que en breve tendremos presiones inflacionarias y esto incidirá en la economía del país vecino y del nuestro.

Eso lleva a concluir que después de todo, no vamos a poder recoger los recursos con pala, tal cual supusieron muchos. Habrá que tener mucho cuidado en las decisiones que se tomen.

Los adultos mayores del país están que trinan de felicidad al enterarse, que deberán esperar hasta las 68 años para recibir ayuda del gobierno.

Para tranquilidad de quienes determinaron ampliar el rango de edad, hay que decir que muchas de las personas de la tercera edad que confiaron su sufragio a MORENA, esperando que hiciera llover maná del cielo, no llegarán a la próxima elección presidencial para poder cambiar el sentido de su voto.

También los ninis están felices al saber que a los tres mil pesos prometidos, como a una famosa bebida energética, les salieron alas. De esos si hay que preocuparse, porque si estarán en los próximos comicios; y no de muy buen humor, según parece.

Y como decían los antiguos, para cerrar con broche de oro, el asunto del güero Velasco, ofende profundamente a los mexicanos, en particular a los chiapanecos.

El actual gobernador interino, es notoriamente cuestionado, tanto por sus actos y omisiones en el ejercicio gubernamental, como por sus aficiones.

Pero lo que hizo, al dejar el ejecutivo estatal, para buscar una senaduría y luego retornar, para ser interino de sí mismo, no tiene parangón.

En el senado se pasaron la ley y al pueblo, ahí por donde no da el sol, a cambio de la mayoría absoluta. Eso no lo hacía ni el PRI en sus mejores tiempos.

¿Qué está pasando señor presidente? Ahora resulta que casi nada de lo que se dijo en campaña, podrá ser; y eso a muchos no les gusta.

Lo que usted haga será determinante. Si MORENA decepciona al electorado, los mexicanos habrán agotado todas las opciones que incluía la baraja y solo quedará repetir y volver a confiar en quienes antes nos decepcionaron o tomar el camino de la sierra.

Y a ninguno nos gustaría cualquiera de ambos escenarios, ¿verdad?

A aplicarse pues, que un país no se gobierna solo con buenas intenciones, sino que necesita un poquito de gracia y otras cositas; que no consisten exactamente en llamar a las reporteras, como se nombra a la válvula cardíaca.

Así que a echarle seriedad a todos estos temas y muchos otros más, que esto apenas empieza.

Le deseo mucha suerte. Me late que la va a necesitar…

Dios, Patria y Libertad