Marcha de AMLO reflejó que importan más sus deseos que la ley

Mientras sus fanáticos y peones tratan de exaltar lo ocurrido el 27 de noviembre en la CDMX, la marcha de AMLO reflejó que importan más sus deseos que la ley

Marcha de AMLO reflejó que importan más sus deseos que la ley
Foto: Datanoticias

La marcha que encabezó el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) reflejó que importan más sus deseos que la ley, misma que bien se pudo haber violado durante la movilización.

Para nadie es un secreto que la marcha se hizo por capricho del presidente; salió carísima y no se sabe cómo se manejaron los dineros. Además, se desarrolló a empujones, sin cumplir los tiempos y sin un objetivo claro.

Lo anterior también podría tratarse de la Refinería de Dos Bocas o el Tren Maya; así como la política energética que decidió emprender la actual administración federal.

Justamente la megaprocesión que encabezó López Obrador es un reflejo fiel de lo que es su gobierno, en el que pesa más el ánimo presidencial que el beneficio para la población; importa más cumplirle el deseo al mandatario que cumplir la ley; y se valora más la estridencia que la coherencia. Para colmo, las multitudes que lo acompañaron en el trayecto no se quedaron a escuchar su “informe”, por lo que habló ante un Zócalo semivacío.

Como sea, este lunes, en Palacio Nacional, el tabasqueño estuvo sonriente, pues logró apaciguar su lastimado ego presidencial al mostrar una marcha más grande que la de hace dos semanas.

Y ése es el gran drama de AMLO: en el fondo él mismo sabe que la megamarcha de ayer no salió de la sociedad, ni fue espontánea, como sí ocurrió con la movilización ciudadana en favor de la democracia y del Instituto Nacional Electoral (INE).

Mientras sus fanáticos y peones tratan de exaltar lo ocurrido el 27 de noviembre en la CDMX, la marcha de AMLO reflejó que importan más sus deseos que la ley.

Con información de Reforma 

JZ