De última hora, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral canceló una reunión con familiares de víctimas de desaparecidos que tenía previsto para este lunes, así lo denunció el familiar de una víctima en conferencia de prensa.
Según José Luis Castillo, padre de una joven desaparecida, el pasado 7 de agosto Corral, firmó un compromiso para recibirlo junto con los familiares de otras víctimas de la violencia en la entidad. Sin embargo de última hora la reunión fue cancelada.
Y es que, durante el mandato del flamante gobernador panista, la violencia repuntó en 2016, justamente a la llegada de Corral y, este año ha alcanzado un promedio de ocho asesinatos al día (con más crueldad: decapitaciones, descuartizados, masacres en casas, ahorcamientos y tortura previa), lo que hace recordar los peores tiempos de la “narcoguerra” atizada por la estrategia calderonista de militarizar la seguridad pública.
En los últimos días, la ola de violencia volvió a dispararse: en lo que va de agosto se han registrado 45 asesinatos (11 murieron ahorcados la semana antepasada), y en la última década de la fallida “guerra contra las drogas”, 13 mil 500 personas –en su mayoría jóvenes– han sido víctimas de homicidio.
Por si fuera poco, este lunes se dio a conocer que, el niño David Rafael “N”, de 6 años de edad, fue encontrado muerto en un terreno baldío de Ciudad Juárez, Chihuahua, tras cinco días de su desaparición.
El infante desapareció el 8 de agosto, según información oficial, cuando se dirigía a una tienda en el Fraccionamiento Praderas del Pacífico, donde vivía.
“Hoy mismo tenemos la identificación del menor, esto hace unas horas, la Fiscalía de la zona norte va a dar a conocer, ya a detalle, las pesquisas que se están realizando”, dijo el gobernador de Chihuahua a medios locales.
Mientras todo esto pasa en la entidad, Javier Corral se dio el lujo de no acudir y despreciar prácticamente a los familiares de las víctimas desaparecidas, en una clara muestra de omisión y una total ineptitud en temas de seguridad y justicia.
