La empresa energética francesa Engie construirá un gasoducto de 16 kilómetros en la Península de Yucatán, con el objetivo de conectar la zona con el sistema nacional de ductos.
Con una inversión de 500 millones de pesos (mdp), la empresa terminará en siete meses el proyecto Cuxtal I, el cual conectará el ducto Mayakan con la red del Sistema de Transporte y Almacenamiento Nacional Integrado de Gas Natural (Sistrangas).
La infraestructura pretende aliviar la falta de gas natural que viven las plantas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en una de las zonas con las tarifas eléctrica más caras del país debido a que deben quemarse combustibles más caros y contaminantes ante la falta de este hidrocarburo.
En ese sentido, la caída de la producción gasera de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la última década obligó a que CFE usara combustibles más caros, como combustóleo y diésel, para producir electricidad en sus cinco plantas eléctricas en la región, cuya necesidad es de 310 millones de pies cúbicos diarios, pero actualmente solo recibe 52.
Te puede interesar | ¿Y la palanca nacional? Pemex cerró 2019 con baja producción de combustible
Las centrales eléctricas de la CFE reciben el suministro de gas natural a través del gasoducto de Mayakán, que a su vez requiere de la producción de este hidrocarburo por parte de Pemex.
“Es en la Península de Yucatán, junto con la otra Península (de Baja California), donde tenemos la generación más cara de electricidad en todo el país”, declaró el director de CFEnergía, Miguel Reyes.
Esta infraestructura de Engie plantea la posibilidad de suministrar gas importado desde el sur de Texas mediante el gasoducto marino al tiempo que cubrirá la necesidades presentes y futuras para generar electricidad.
“Esto que estamos presenciando el día de hoy es algo trascendente, importante, porque se va resolver un problema sentido, una necesidad sentida que tiene que ver con abasto del gas para el sureste y en especial para la península de Yucatán”, declaró el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante la inauguración de la obra en Chiapas.
La pregunta aquí es ¿Qué tipo de daños ambientales provocará este proyecto?
Y además ¿esto también afectará a las comunidades indígenas?
No hay que olvidar que el pasado 28 de enero, comunidades indígenas de Calakmul y Xpujil, obtuvieron una suspensión provisional por parte del Poder Judicial de la Federación y con ello lograron frenar la construcción del Tren Maya.
Con información de Forbes México y Expansión
