MANCERA Y MORENO VALLE, EFICACIA MEDIÁTICA

Las evidencias estaban ahí, pero todo indica que ni Rafael Moreno Valle ni Miguel Ángel Mancera pudieron o quisieron verlas.

Y no fue sino hasta que los reflectores de los medios de comunicaciones se posaron sobre ellas que los gobernantes de Puebla y el Distrito Federal –milagrosamente– las notaron.

Nos referimos a las crisis que viven los gobiernos de Moreno Valle y Mancera.

Como ya dijimos en el Itinerario Político del 22 de octubre, en los últimos 12 meses la prensa local ha contado 23 intentos de linchamiento en Puebla y cuatro que se consumaron. Sin embargo, es hasta hoy que los medios de comunicación miran hacia Ajalpan que el gobernador Rafael Moreno Valle –finalmente– parece dispuesto a atender el problema de gobernabilidad en su estado.

Y su par en la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, lleva el mismo camino.

No alcanzan los dedos para contar las evidencias de que el crimen organizado opera en el Distrito Federal. Pero el gobierno de Mancera tuvo que ver un colgado en las primeras planas de los periódicos para decidirse a actuar.

De acuerdo con El Universal, los muertos que aparecieron en Iztapalapa el 20 y el 21 de octubre serían el resultado de una lucha de grupos criminales en el Reclusorio Oriente. “La confrontación se da entre (el grupo de) Luis Eusebio Duque Reyes El Duke (…contra el grupo de) Paulo Sergio Contreras El Avispa y Ricardo Andueza El Miraviones”. Este diario afirma que “El avispa” y “El duke” operan ¡desde 2010! ¿Y qué había hecho Miguel Mancera al respecto? Hasta hace unos días, había preferido mirar hacia otro lado; pero los reflectores mediáticos lo han obligado a tomar medidas y ordenar investigaciones.

En ambos casos, vemos a gobernantes omisos que, al parecer, definen su agenda con base en las presiones de los medios de comunicación. Se trata, pues, de mera “eficacia” mediática.

¿Será porque ninguno se quiere manchar de aquí a 2018?