En Chile, a lado del presidente Gabriel Boric, AMLO se victimizó y atacó a los medios de comunicación. Un clásico en el tabasqueño.
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aseguró que del expresidente de Chile, Salvador Allende, aprendió que:
Una “verdadera transformación” depende del esfuerzo para despertar la “conciencia cívica” de los pueblos.
En un mensaje conjunto con el mandatario de Chile, Gabriel Boric, López Obrador recordó que siendo estudiante de Ciencias Políticas en la UNAM se enteró del golpe de Estado en Chile, un episodio que lo marcó.
“Se decía en aquel tiempo, hablando precisamente del presidente Allende, que ser joven y no ser revolucionario era una contradicción. Pero ser revolucionario no necesariamente implica tomar las armas. El propio presidente Allende eligió un camino diferente, él era un pacifista. Por eso, aquello fue un crimen horrendo. La traición de Augusto Pinochet fue abominable, es una mancha que no se borra ni con toda el agua de los océanos.
“El presidente Allende nos dejó muchas lecciones de humanismo, dignidad y democracia, de él aprendimos que la mejor forma de lograr una verdadera transformación depende mucho del esfuerzo que hagamos para despertar la conciencia cívica, del cambio de mentalidad en nuestros pueblos, no solo de un grupo o de una minoría, sino de amplios sectores de la población, de una mayoría suficientemente poderosa para establecer un nuevo orden social y político”, expresó López Obrador.
Además, dijo que esta visión demanda de “acciones concretas” en favor de los más necesitados y que, en el caso de su administración, ha dado buenos resultados.
“En nuestro caso la estrategia política que seguimos, y que nos ha dado buenos resultados, se podría resumir en la frase: por el bien de todos, primero los pobres”, aseguró.
Boric destaca relaciones entre México y Chile
Por su parte, Gabriel Boric dijo que las relaciones entre México y Chile están estrechamente vinculadas, pero no solo son pasado, sino presente y futuro.
Recordó que estos vínculos se fortalecieron el 11 de septiembre de 1973, el día del golpe de Estado en Chile, cuando el entonces Embajador de México en aquel país, Gonzalo Martínez Corbalá, abrió las puertas a más de 3 mil chilenos que encontraron resguardo y asilo de las autoridades mexicanas, incluida la familia del presidente Allende.
“Aunque somos países de nuestra gran patria latinoamericana, alejados geográficamente, tenemos una cercanía y un desafiante presente y futuro que se construye en democracia con justicia y libertad”, destacó el mandatario chileno.
En Chile, a lado de Boric, AMLO se victimiza y ataca a medios de comunicación
Durante su discurso, AMLO aprovechó para victimizarse y lanzarse contra los medios de comunicación que los critican y cuestionan.
Incluso en lugar de medios de comunicación, los llamó “medios de manipulación”, algo que se puede considerar un nuevo ataque contra la libertad de expresión en México.
“Sin el apoyo del pueblo no habríamos podido resistir la intensa campaña en contra nuestra por parte de los medios de información. Los medios manipulación, expertos en la calumnia. Y, repito, en la manipulación”, dijo.
De pena ajena lo que se vio, pues, en Chile, a lado del presidente Gabriel Boric, AMLO se victimizó y atacó a los medios de comunicación.
Ya que se animó a viajar fuera de México (Ya ven que como es chiquito e ignorante no se sabe comportar), no desaprovechó esa gran oportunidad de hacerse la víctima frente a los chilenos.
Pobrecito del Benito Juárez wannabe, el mundo está en su contra y eso que es el mejor… pic.twitter.com/WdNZmRCEDT
— Héctor Suárez Gomís (@PelonGomis) September 10, 2023
Con información de Reforma
JZ
