Jaime Torres, el agricultor sobreviviente al ataque de la Guardia Nacional, dijo que los efectivos castrenses fueron quienes dispararon sin ninguna provocación a él ya su esposa Yessica.
“Dispararon de pura espalda”, dijo en conferencia de prensa desde su casa ubicada en el municipio Meoqui.
El agricultor negó que él u otros campesinos atacaran previamente a elementos de la GN la tarde del 8 de septiembre.
“Nosotros veníamos en caravana de Boquilla. Todos los agricultores traíamos una leyenda de ‘Sin agua no hay vida’. Cuando veníamos llegando a Delicias, pasó un carro, un carro chico con la leyenda ‘Sin agua no hay vida’ y lo iban custodiando dos camiones de la Guardia Nacional. El carrito bajó a una intercepción y nosotros lo seguíamos para ver qué estaba pasando, para brindarle ayuda, porque llevaba la leyenda de nosotros”, relató Jaime Torres.
Jaime Torres, sobreviviente al ataque de la Guardia Nacional en Chihuahua, apareció por primera vez ante los medios. Aún con las heridas y en compañía de sus hijos, dio su versión de cómo él y su esposa fueron atacados al regresar de la presa La Boquilla: pic.twitter.com/Wx4l9X2i42
— Ciro Gómez Leyva (@CiroGomezL) September 24, 2020
Dijo que escuchó unos disparos y “ya no supo nada”, pues recibió uno de los balazos en su espalda; “no los provoqué”, agregó al ser cuestionado por medios.
Lo curiosos aquí, es la versión por parte de Luis Rodríguez Bucio, Comandante de la GN, misma que contrasta con las declaraciones de Jaime, ya que aseguró que después de que sus elementos se retiraron de la presa, algunos manifestantes tomaron materiales de grado militar que quedaron en el lugar, entre ellos “granadas”, posiblemente refiriéndose a los proyectiles de gases lacrimógenos o de humo que se utilizaron para dispersar a los inconformes.
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Aseguró que después de la retirada, tres sospechosos se acercaron a un destacamento militar y los amenazaron con arrojarles granadas, acción que hizo detener a los sospechosos, subirlos a vehículos de la GN para trasladarlos a una ciudad cercana con la intención de entregarlos a fiscales civiles.
En ese momento, detalló el comandante, vehículos conducidos por manifestantes interceptaron al convoy de la GN en el que se trasladaba a los sospechosos.
Los agentes escucharon disparos y uno de los elementos de seguridad comenzó a disparar, impactando una camioneta en la que viajaban el matrimonio de Jaime Torres y Yésica Silva Zamarripa, de 36 años, quien murió en el ataque.
SG
