UN PEQUEÑO MILAGRO EN LA CIUDAD DE MÉXICO

La fe logró lo que la ley y la civilidad no pudieron

 

“No se vive sin la fe. La fe es el conocimiento del significado de la vida humana. La fe es la fuerza de la vida. Si el hombre vive es porque cree en algo.” –Leon Tolstoi

Ultimamente hemos visto tantos horrores, que a fin de cambiar un poco el tono sombrío, me gustaría contarles algo positivo que sucedió en mi colonia en la Alcaldía Miguel Hidalgo en la Ciudad de México. (Spoiler alert: no tiene nada que ver los autoridades).

Durante años, la basura se apiló en una cierta esquina de la colonia. Desde luego no era el lugar adecuado, pero a los vecinos no les importaba. Dejaban sus bolsas de basura para que el camión las recogiera cuando pasara.

Varios alcaldes trataron de solucionar el problema instalando enormes letreros de lona con frases como “Vecino cochino”, “No tires basura” y otras admoniciones para que no depositaran ahí la basura, nada funcionó.

La bolsas y cajas llenas de desperdicio seguían apilándose todas las semanas, para gran felicidad de las ratas y moscas que pululaban por ahí. Todo indicaba que era un problema sin solución.

Todo cambió hace un par de años cuando un vecino decidió tomar cartas en el asunto. Un día, tan pronto pasó el camión de basura, envió trabajadores que limpiaron bien el área y colocaron un pilar de cantera gris.

Sobre él, una imagen de la Santísima Virgen de Guadalupe del mismo material. La virgen realizó un pequeño milagro: desaparecieron las bolsas de basura (y con ellas las ratas, moscas y mal olor) y en su lugar comenzaron a aparecer macetas con flores y en la pared, en vez de letreros, hay focos de colores. El ánimo de los que caminamos por ahí, también cambió. En vez de atravesar la calle para evitar el mal olor o toparnos con una rata, ahora nos podemos detener un momento para hacer una breve oración.

El vecino que tuvo la genial idea, supo entender que nadie en la colonia (y probablemente en ninguna parte del país) se atrevería a dejar basura a los pies de la Virgen de Guadalupe. La fe logró lo que la ley y la civilidad no pudieron.

Buen domingo a todos y gracias por leerme.

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