Más irregularidades durante el primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador salen a luz, pues en dicho lapso cerca de 171 compañías recibieron 366 millones de pesos por parte de 92 dependencias federales.
Incluso, entre el 1 de noviembre de 2018 y febrero de 2019 se crearon 90 de las 171 empresas, que de inmediato se convirtieron en proveedoras de la “Cuarta Transformación”.
Con base en información de Proceso, durante los primeros 12 meses de la administración de López Obrador dichas compañías firmaron 561 contratos gubernamentales, de los cuales siete de cada 10 fueron adjudicaciones directas.
Incluso, una cuarta parte de esa compañías facturaron sus primeros contratos públicos a lo largo de su primer trimestre de existencia y otras hasta en su primera quincena. ¿Casualidad?
Un ejemplo de éstas es Laguna Cleaning, del sector limpieza, que se creó el 21 de diciembre de 2018, por Isabel Izaguirre y Mariangel Tamayo Izaguirre, y en 11 días obtuvo adjudicaciones directas de la Secretaría del Trabajo con un valor de 85 mil pesos.
Mientras que MSA Médica, correspondiente al sector clínico, solo se demoró 21 días en recibir su primera adjudicación directa por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para después sumar otros cinco contratos por 1.2 millones de pesos.
Cabe señalar que de los 561 contratos que se entregaron a las compañías el 58 por ciento los brindaron seis dependencias: el IMSS, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, Aeropuertos y Servicios Auxiliares, así como las secretarías de la Defensa, de Comunicaciones y Transportes, y de Gobernación.
Un común denominador durante esta administración obradorista es que casi todos los contratos gubernamentales se están otorgando por adjudicación directa, algo que mucho tiempo criticó el tabasqueño, pero ahora, según él, así se combate a la corrupción.
Con información de La Silla Rota
