¿Quién los para? Despilfarro con “D” de diputados

Desde hace tiempo, en La Otra Opinión hemos documentado los casos de despilfarro en todos los estados de la República Méxicana.

De este modo pudimos comprobar que la clase política de todo el país no tiene reparos cuando se trata de gastar, sobre todo cuando es dinero que no proviene de sus bolsillos.

En esa lógica, vale la pena mencionar que uno de los casos de despilfarro más recientes lo protagonizan los diputados federales, quienes arrendaron –a su nombre– 80 automóviles híbridos para 2016.

Sin duda, el uso de estos vehículos es un acierto –pues favorecen al medio ambiente–, no obstante, el desacierto radica en que el presupuesto para el arrendamiento proviene del erario público.

Cabe destacar que Toyota es la agencia que distribuirá los coches y cada uno tiene un costo en sucursal de 339 mil 700 pesos. Pero la Cámara, que aparentemente no estuvo interesada en negociar– pagará 32 mil 799 pesos más por casa auto. Es decir, que su costo será de 372 mil 499 pesos.

El otro caso de despilfarro tiene lugar en Colima, donde se dio a conocer que los legisladores locales se aumentaron el sueldo en este año de 113 mil 562 pesos al mes a 200 mil.

Lo anterior significa que los diputados colimenses ganan el doble de lo que obtiene mensualmente el gobernador Ignacio Peralta por dar servicio a la entidad, pues éste recibe 97 mil pesos en el mismo periodo.

Sin lugar a dudas, los legisladores del país no pierden la oportunidad de sacar ventaja de su cargo, ya sea que se aumenten el sueldo considerablemente o que decidan rentar automóviles híbridos bajo el pretexto de contribuir al cuidado del medio ambiente.

Quien fuera diputado… ¿O no?