Ricardo Anaya, aspirante presidencial de la coalición “Por México al frente” denunció que un supuesto grupo de choque lo estaba esperando en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para agredirlo en su arribo la madrugada de este 14 de marzo.
En las primeras horas de la mañana, anaya Cortés subió un video en cual acusa que cuando él llegó a las 3:30 de la mañana, procedente de Alemania, un “grupo de choque” lo estaba esperando para insultarlo, y que cuando se acercó a grabarlos, estos ocultaban sus rostros.
El candidato acusó directamente al PRI de esta acción —supuestamente— como una estrategia en su contra, ya que —según él— no hay gente a esa hora para protestar en el aeropuerto. Asimismo, pidió que la PGR y el presidente Peña Nieto dejen de intervenir en la elección.
Por su parte el Senador Javier Lozano, aseguró que esta “protesta” solo se trata de un montaje de Anaya.
Por el momento, es la palabra de Anaya contra la palabra de Lozano, pues todavía no hay elementos para determinar si, como dijo Anaya, quienes se manifestaron en su contra eran un “grupo de choque del PRI”; o si —como dijo Lozano— todo se trató de un montaje del panista.
Pero lo cierto, es que la credibilidad de Anaya está minada por anteriores montajes armados para victimizarse.
Por ejemplo, el pasado 13 de febrero Anaya compartió un video en el cual se decía perseguido por un Jeep en el cual viajaba un agente del CISEN. El candidato incluso encaró al agente y le dijo: “En lugar de perseguir delincuentes, espían opositores”. Acusando que llevaban tres días siguiéndolo, pero desde un auto compacto.
El detalle es que Anaya y el PAN ya habían sido avisados por la Secretaría de Gobernación de que el Cisen les realizaría un seguimiento por razones de seguridad, como parte de las precampañas. Sabedor, el candidato del Frente grabó el video y lo dio a conocer dos días después, justo cuando terminó el periodo de precampañas e inició el de intercampañas.
En otro montaje, el pasado 25 de febrero, Anaya acudió a instalaciones de la PGR para aclarar las acusaciones de lavado de dinero, pero en vez de rendir declaración ante el fiscal antilavado, sólo entregó una carta. Así quedó evidenciado en un video difundido por la propia PGR.
De modo que en el seno del equipo del aspirante albiazul, la victimización sigue siendo la estrategia principal. ¿Quién le cree a Anaya después del desgaste de su imagen?
