Poco han hecho autoridades y Ejército para frenar impunidad en México

Pese a la captura de Ovidio Guzmán —que, una vez más, generó caos en Sinaloa—, realmente poco han hecho las autoridades y el Ejército para frenar la impunidad en México

Poco han hecho autoridades y Ejército para frenar impunidad en México
Foto: Reuters

Es una lamentable realidad que poco han hecho las autoridades y el Ejército para frenar la impunidad en México. Algo que parece no hacer eco en los pasillos de Palacio Nacional.

Exageradamente mal están el panorama delictivo y la falta de autoridad. La impunidad con la que deambulan los narcotraficantes por Sinaloa y otras regiones del país, exhibiendo sus armas y su ilegalidad, es indignante. ¿Para eso están el Ejército y las autoridades?

La impunidad con la que matan y causan daños, sin pagar casi ninguna de sus culpas, es la causa real de la violencia en México.

Lo anterior va de la mano con la incompetencia de las autoridades locales y federales para quitarle el control al crimen organizado y, sobre todo, las pocas ganas que parecen tener de perseguirlos suena a contubernio.

Pero la desgracia se agrava cuando ni el propio presidente se preocupa, menos los persiga y, para colmo, hasta los vaya a visitar a las zonas donde la ley son ellos. Como en Badiraguato, Sinaloa, donde no se produce nada más que droga, es algo inaudito.

Tampoco se puede olvidar la terrible e ilegal inacción exhibida cuando se dejó libre a Ovidio Guzmán después de haberlo detenido en 2019. Algo, totalmente incomprensible.

Bloques y quemas de autos… algo común

Además, la persecución de delitos como la quema de tráileres, camiones y comercios; el desquiciamiento de una ciudad entera, las fugas de reos, son ya algo común.

También llama la atención, la no persecución de los responsables de disparar contra aviones del Ejército y uno de Aeroméxico. ¿Por qué no castigar dicho delito que debiera ser considerado como una acción terrorista?

Ciudadanía justifica irresponsabilidad 

Asimismo, preocupa la normalidad con la que los ciudadanos ven estas gravísimas fallas del gobierno y la superficialidad con la que las valoran y las consecuentan es penosa, pues la mayoría de los mexicanos siguen apoyando a la actual administración justificando así su irresponsabilidad.

Lo ocurrido el 5 de enero era una buena oportunidad para detener a más personas y que el gobierno ganara más que sólo la captura de un capo. Se podía haber hecho algo que los pusiera en su lugar, como a cualquier delincuente que comete un delito.

Sin embargo, ahí siguen los en las calles los criminales con sus armas largas: impunes, en las narices del propio Ejército, que no se ve que esto le preocupe, pues pareciera estar muy ocupado en otros múltiples temas.

Pese a la captura de Ovidio Guzmán —que, una vez más, generó caos en Sinaloa—, realmente poco han hecho las autoridades y el Ejército para frenar la impunidad en México.

Con información de Reforma 

JZ