El pasado 27 de junio, el Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), detallaba que los entonces candidatos presidenciables no contaban con un plan de seguridad, al menos no uno alterno a la afamada “guerra contra el narco”. Y ahora Loretta Ortiz, integrante del consejo asesor de seguridad del virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador lo confirmó.
Según Loretta Ortiz, el gabinete de seguridad de AMLO, perfiló que la condición que pondrá el nuevo gobierno para mediar con las bandas delictivas antagónicas, era que las organizaciones criminales anunciarán su retiro del “campo de la ilicitud”. En pocas palabras pedirles de favor que dejen de delinquir.
“En el caso, entre ellos, que hay conflictos incluso entre grupos, lo que se puede ofrecer es la mediación comunitaria, que de hecho ya se ofrece; por ejemplo, en el caso de Tepito se actúa a través de esta mediación comunitaria”, aseguró Loretta Ortiz, en entrevista con Milenio.
Pero lo que jamás mencionó fue un incentivo para que las bandas criminales dejen de comer crímenes, pues es bien sabido que su principal motivación para comer este tipo de actos, son las ganancias millonarias que el “negocio” deja, el control del poder y hasta de territorios.
Al parecer, el gabinete de AMLO confía en que las bandas criminales actúen de buena fe, que entre ellos mismos se pongan de acuerdo para dejen de pelearse, pues creen que sólo con buenos deseos los índices de criminalidad en el país, disminuirán al fin.
