A siete semanas de que se reiniciaron las rondas ministeriales, la canciller canadiense Chrystia Freeland admitió este viernes que Estados Unidos y Canadá han podido avanzar en sus negociaciones comerciales sobre reglas de origen para el sector automotriz, gracias a que resolvieron algunos inconvenientes durante las pláticas con México.
Freeland reconoció el aporte mexicano para que este proceso avance, a pesar de las contradictorias decisiones que han tenido con el presidente estadounidense Donald Trump. “Algunos temas importantes para Canadá fueron resueltos de una manera positiva entre Estados Unidos y México en el verano y quiero decir nuevamente que México hizo algunas concesiones significativas, probablemente bastante difíciles, este verano, que probaron ser útiles”, dijo.
Tras concluir la segunda ronda de conversaciones del día de ayer con el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, la canciller destacó los avances logrados entre los equipos técnicos, y mencionó en particular que las reglas de origen para el sector de automóviles, que se refieren al porcentaje de partes fabricadas en cualquiera de los tres países, podrían ser usadas en algunos automóviles armados en el bloque “creando la posibilidad para que Canadá y Estados Unidos continuarán adelante”.
“Las conversaciones han sido constructivas. Estamos realmente trabajando muy duro, de una manera intensa”, dijo la funcionaria canadiense a los periodistas que la esperaban afuera de la sede de la Oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR), reafirmando su optimismo sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo benéfico para todos.
