¿Morenistas buscan censurar a opositores en San Lázaro?

Los adversarios de Morena están convencidos que, de aprobarse la ley, se estaría violentando su libertad de expresión

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A raíz de las frenéticas protestas de los partidos opositores durante las comparecencias de los secretarios que integran el gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador, el grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados anunció la creación de una iniciativa que modifique el reglamento interno de San Lázaro para que todo legislador se dirija con “respeto, corrección, civismo y cortesía” a funcionarios federales, diplomáticos y representantes estatales y municipales.

Como era de esperarse, los integrantes del PAN y PRD de manera inmediata condenaron la propuesta de los morenistas pues consideran que más que respeto, lo que busca el partido de la presidencia es silenciar a quienes cuestionen sus decisiones.

“Es más bien un intento de censura, es decir, hay un temor enorme por parte de la bancada mayoritaria de que, con argumentos, se pueda plantear a los oradores, concretamente a los funcionarios públicos, rendir respuestas en el contexto de un parlamento, y creo que eso es una regresión hacia los sistemas autoritarios, de censura”, declaró la panista Adriana Dávila.

Por su parte, la líder del PRD, Verónica Juárez, acusó a los legisladores del Movimiento Regeneración Nacional de intentar violentar la libertad de expresión de sus adversarios, incluso aseguró que no están muy lejos de revivir la famosa “ley mordaza”.

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Dicha iniciativa se determinó luego de que el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, acudió al Palacio Legislativo a comparecer y un grupo de diputados cuestionó su actuar ante la crisis de violencia.

“En la pasada comparecencia del licenciado Alfonso Durazo, un grupo de diputados presentó su punto de vista diverso al secretario, pero cuya efusividad llevó a acosar, invadir el espacio vital del funcionario y hostigarlo en un acto muy lejano al respeto y por tanto tendente a sabotear el intercambio de ideas y del diálogo mismo”.

Con información de Milenio