Ayer por la tarde –después de un homenaje póstumo a Don Luis H. Álvarez–, el expresidente Felipe Calderón y su esposa, Margarita Zavala, coquetearon con la idea de que el PAN vaya en alianza con el PRD en la elección presidencial de 2018.
Los panistas reconocieron que su partido –el PAN–, ha competido en alianza con el PRD en otras ocasiones. También recordaron que este acercamiento con la izquierda les ha dado buenos resultados.
En esa lógica, los Calderón-Zavala dijeron que nunca han descartado la idea de aliarse con el PRD y que la elección del próximo 5 de junio servirá para evaluar la efectividad de estas alianzas, y “platicar” al respecto.
Sobre el tema, no está de más recordar que aquí dijimos que el presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, trató de arrebatar la candidatura a Margarita Zavala cuando anunció que negociaría una alianza con el PRD.
Y es que la historia del proceso electoral de 2006 hace inviable –y casi imposible– que la esposa de Felipe Calderón compita con las siglas del PRD.
Sin embargo, cuando los Calderón dicen que estarían dispuestos a buscar la alianza con el PRD, demuestran que el movimiento de Anaya sería poco efectivo pues de ser necesario, competirán por quedar al frente de un bloque de oposición entre la izquierda y la derecha.
