Las fake news sobre el “gasolinazo”

De hecho, con la liberación de los precios el precio de la gasolina Premium ha bajado hasta un 25.3  por ciento en algunas expendedoras.

Sin sustento sobre temas delicados, se puede provocar psicosis colectiva; tal y como ocurrió precisamente a inicios del año pasado, cuando grupos y militantes adscritos Morena alertaron a la ciudadanía a través de WhatsApp, respecto a un “megagasolinazo”.

Hoy, continúan existiendo voces –incluso de las llamadas autorizadas– que a través de suposiciones muy personales, difunden “una probablidad latente” de un nuevo gasolinazo.

Vamos por partes. No puede existir un nuevo gasolinazo, pues a partir de la liberalización del precio de las gasolinas en todo el país –a partir del último día de noviembre de 2017– el costo de los combustibles no es dictado por la Secretaría de Hacienda.

En cambio, la dependencia mantiene estímulos fiscales en el impuesto a gasolinas, con el fin de evitar variaciones abruptas en los precios, mismas que no han ocurrido hasta el momento.

Como tal, un gasolinazo es un término que podría incluso, recurrir actualmente al desuso; sin embargo, si prefiere manejar o asociar dicha palabra con el aumento al precio de la gasolina y diésel. Pero aquí le explicamos el por qué de las variantes en los costos.

Cada empresa expendedora –gasolinera– determina el costo al consumidor del combustible, que seguirá siendo suministrado por Pemex. Es decir, los precios finales ya no reflejan decisiones administrativas o fiscales, sino los costos de toda la cadena productiva: precio internacional del petróleo, transporte y almacenamiento, margen comercial, costo de refinación, tipo de cambio e impuestos.

De hecho, con la liberación de los precios el precio de la gasolina Premium ha bajado hasta un 25.3  por ciento en algunas expendedoras.

Es importante además, no dejarse llevar por las “fake news” que circulan en redes sociales, donde –desde el año pasado– se asegura que el precio del combustible alcanzará los 20 pesos por litro, cosa que no ha sucedido.

Distintas empresas, cuya seriedad está fuera de duda, han documentado que más de tres mil cuentas de redes sociales —Twitter, Facebook y todas las de reciente creación— han sido utilizadas para engañar, mentir, difamar, inventar y deformar la realidad.

El dato – Durante el gobierno de José López Portillo, la gasolina incrementó su precio en casi 900 por ciento; en el de Miguel de la Madrid en dos mil 400 por ciento; en la administración de Peña Nietoalcanzó un 47.9 por ciento.