“La austeridad ha muerto”, expertos critican el endeudamiento de la 4T

La 4T ha solicitado más préstamos que el gobierno de EPN y la deuda del país se ha duplicado durante este sexenio

“La austeridad ha muerto”, expertos critican el endeudamiento de la 4T
Foto: Vanguardia

Durante su campaña electoral, Andrés Manuel López Obrador prometió que no endeudaría al país.

Para ello, dijo que su gobierno no solicitaría más créditos, ni préstamos y que sólo gastarían lo que hayan ahorrado por medio de sus medidas de austeridad y su combate a la corrupción.

Sin embargo, esto resultó ser una gran mentira, pues la 4T ha solicitado más préstamos que el gobierno de Enrique Peña Nieto y la deuda del país se ha duplicado durante el sexenio de López Obrador.

4T tiene cinco préstamos activos

 

De acuerdo con el Banco Mundial (BM), el gobierno de López Obrador ha pedido ocho préstamos en los últimos tres años.

Datos del BM revelan que entre 2019 y 2021, México ha recibido ocho préstamos por un total de 3.855 millones de dólares, 57 por ciento arriba de los dos mil 462 millones de dólares registrados en toda la gestión de EPN.

Uno de estos préstamos, por 1.000 millones de dólares, fue destinado para hacer frente a la pandemia del coronavirus y se realizó en mayo de 2020.

Sólo cinco de éstos ocho préstamos siguen activos, por un total de mil 955 millones de dólares.

De acuerdo con el Banco Mundial, los préstamos vigentes con México son los siguientes:

1.- 110 millones de dólares para la modernización del sistema financiero público.

2.- 120 millones para obras hidráulicas del Valle de México.

3.- 750 millones para medio ambiente.

4.- 750 millones para sostenibilidad económica.

5.-  225 millones para el Sistema Nacional de Identidad Única

4T aprobó un endeudamiento con Ley de Ingresos 2023

 

Por otro lado, los lacayos de la 4T en la Cámara de Diputados aprobaron el pasado 21 de octubre la Ley de Ingresos para 2023.

Ante ello, diversos especialistas criticaron esta ley al señalar que con ello también se avaló un endeudamiento interno de 1.17 billones de pesos, lo que representa un crecimiento de 31.1 por ciento en comparación con lo aprobado para este año.

Con dicha cifra, el techo de endeudamiento, conocido como Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP), se elevó a 1.29 billones de pesos, ambos montos récord.

Coincidieron en que dicha deuda es manejable en el corto plazo, pero advirtieron que la siguiente administración tendrá que impulsar una nueva reforma fiscal que garantice ingresos suficientes para solventar el gasto público los siguientes años.

Asimismo, criticaron que con esta deuda, el Gobierno incumple su compromiso de austeridad y de no incurrir en más endeudamiento, por lo cual sugirieron que se debe cuidar no llegar a montos difíciles de manejar y heredar un problema mayor a las generaciones futuras.

Inflación merma la capacidad de pago del Gobierno

 

Ricardo Cantú Calderón, coordinador de ingresos y deuda del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), resaltó que para 2023 se está incurriendo en mayor endeudamiento; pero, enfatizó, también se pagará más por ella, debido al actual ciclo de altas tasas de interés a nivel global.

Estimó que la deuda por habitante se elevará de 114 mil 610 pesos en 2022 a 128 mil 150 pesos en 2023, considerando el monto del Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP).

Por último, estimó que los próximos dos años todavía será manejable el endeudamiento, pero cada vez será más costoso cubrir con estos recursos el desbalance fiscal que hay de gastar más de lo que se recauda, por lo que resaltó la necesidad de impulsar una reforma fiscal que garantice mayores ingresos.

Por su parte, Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público de México Evalúa, afirmó que el mayor endeudamiento aprobado para 2023 muestra que “la austeridad ha muerto”, ya que la alta inflación en el país ha encarecido los insumos y merma la capacidad de pago del Gobierno.

Está preparándose (el Gobierno) para tener un buen colchón y utilizar ingresos más bien por endeudamiento para poder hacerle frente a las obligaciones de gasto y poder adquirir insumos”, opinó.

Por último, recordaron que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP),  a través del Presupuesto de Egresos y la Ley de Ingresos de 2023, solicitó un techo de endeudamiento de un billón 334 mil 225.9 millones de pesos.

Dicha cifra representa un incremento extraordinario real de 25.6 por ciento, respecto a los adeudos contratados durante 2022; cuando el gobierno federal contrató un pasivo de un billón 62 mil 282 millones de pesos, para cubrir los faltantes en la recaudación y el gasto público.

Especialistas temen que incremento de pasivos es para que Morena asegure elección presidencial

 

Ramón Martínez, especialista en Economía y Finanzas de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), comentó que el incremento de la deuda pública “enciende los focos rojos” sobre la economía mexicana.

Hay una preocupación seria, porque en el Presupuesto de Egresos de 2023 se da marcha atrás en la política que tanto había resaltado en el gobierno de no pedir deuda y se habla de un monto importante de deuda extranjera”, dijo.

Apuntó que entre los analistas, calificadoras e inversionistas existe el temor de que el incremento en los pasivos federales también ayude a cubrir los recursos que necesitará Morena para asegurar las elecciones de 2024”; no solo en la contienda presidencial, sino a nivel de estados y municipios.

La preocupación es que esta deuda, en vez de destinarse a infraestructura, para incrementar el desarrollo económico, se use con fines electorales y para continuar con obras emblemáticas que están saliendo del presupuesto y están requiriendo incrementos fuertísimos: Dos Bocas, el Tren Maya y el Aeropuerto Felipe Ángeles”, agregó.

Por último, en lo que va de la actual administración, la solicitud de deuda interna planteada al Congreso ha aumentado en 127 por ciento.

En el 2019, primer año de gobierno de López Obrador, lo solicitado fue por 514 mil 500 millones de pesos, cifra que paulatinamente fue incrementando hasta duplicarse.

Esto podría contrastar con anteriores administraciones; por ejemplo, en los primeros cinco años del gobierno de Enrique Peña Nieto, el techo de endeudamiento se incrementó 19.3 por ciento, mientras que en el mismo periodo de Felipe Calderón lo hizo en 56.2 por ciento.

Con información de El Financiero, AP News y La Razón

MSA