La exprimera dama de Estados Unidos, Laura Bush calificó de “cruel” e “inmoral” la política de tolerancia cero del presidente Donald Trump de separar a padres e hijos que han entrado ilegalmente a la Unión Americana.
La esposa de George W. Bush comparó la política del magnate republicano con los campos de concentración de la Segunda Guerra Mundial.
“Vivo en un estado fronterizo. Aprecio la necesidad de cumplir la ley y proteger nuestras fronteras internacionales, pero esta política de tolerancia cero es cruel. Es inmoral. Y me rompe el corazón”, escribió en artículo de opinión para The Washington Post.
Bush no fue la única mujer que se sumó al coro de críticas a la política del primer mandatario estadounidense. Nada más y nada menos que la actual primera dama, Melania Trump también condenó el hecho, de acuerdo con su directora de comunicación, Stephanie Grisham.
“La señora Trump odia ver a los niños separados de sus familias y espera que las dos partes (en el Congreso) puedan finalmente ponerse de acuerdo para lograr una reforma migratoria exitosa”, dijo a CNN Grisham.
Poco creíble el sentir de Melania, pues solamente hizo eco de las palabras de su esposo, quien culpa a los demócratas de esta política pese que no se hizo efectiva hasta una orden tomada bajo su mandato.
