En noviembre de 2020, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su gobierno “no espiaba” a sus opositores.
Luego que El Universal reveló que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) daba un “seguimiento puntual” a los integrantes del movimiento del Frente Nacional Anti-Andrés Manuel López Obrador (FRENA), el mandatario tabasqueño rechazó esta versión y aseguró que eso “ya no se hace”.
Aquí no nos hemos cansado de decir que todo lo que dice y promete López Obrador son puras mentiras, y para seguir desmintiendo al farsante de Palacio Nacional tenemos una investigación del diario El País el cual reveló que la Fiscalía General de la República (FGR) compró un software para espiar masivamente teléfonos móviles en México.
De acuerdo con el portal español, la fiscalía encabezada por Alejandro Gertz Manero compró entre 2019 y 2020 un programa llamado Geomatrix, el cual permite la geolocalización y análisis de datos masivos.
Para adquirir este software, se gastó 5.6 millones de dólares en al menos cuatro contratos y que dichos recursos se obtuvieron bajo la partida secreta en materia de gastos de seguridad nacional, con lo cual dichos contratos no fueron transparentados.
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“En el sexenio anterior la compra del programa Pegasus con el que se espió a activistas y periodistas también se realizó con cargo a esta bolsa del presupuesto que se usa de forma discrecional y es poco transparente”, se lee en la investigación firmada por Zorayda Gallegos.
La investigación señala que Neolinx de México es la compañía que sirvió como intermediaria entre la FGR y la firma italiana Hacking Team para adquirir este programa de espionaje.
“La Red para la Defensa de los Derechos Digitales R3D hizo un análisis de los datos divulgados tras la filtración y denunció que al menos 12 estados del país tuvieron relaciones comerciales con Hacking Team, a través de sus diversas intermediarias. Según el análisis hecho por la R3D en ese entonces Neolinx habría vendido sus productos al Gobierno de Guerrero y del Estado de México, así como a la Policía Federal, PGR y Defensa Nacional, entre otras dependencias”, expone la investigación.
Por último, se señala que la compra de este software no es ilegal, ya que las autoridades justifican su adquisición para su uso en el combate de la delincuencia organizada.
Sin embargo, se advierte que ello no impide que se use para espiar de forma ilegal a las personas, violando el derecho a la privacidad de los mexicanos.
¿Con qué maroma saldrá AMLO para defenderse y justificar esto?
¿Dónde están los lacayos de la 4T que repudiaron como el gobierno de Enrique Peña Nieto adquirió el programa de espionaje Pegasus y acusaban que el gobierno espiaba a los mexicanos?
Este reportaje coincide que la aprobación del nuevo Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, con el cual se recabarán los datos biométricos de los usuarios, y que la oposición acusó que ello se trata de una nueva herramienta autoritaria.
Con información de Xataka y El País
MSA