Seis exsecretarios de Salud (Ssa) emitieron 14 acciones urgentes para lograr tener un mejor manejo de la pandemia del coronavirus en México, esto al considerar que la actual estrategia emprendida por el Gobierno Federal ha sido deficiente.
Para ello, los extitulares de esta dependencia, Mercedes Juan López, José Ángel Córdova, Salomón Chertorivsky, José Narro, Julio Frenk y Guillermo Soberón, advirtieron que esta crisis sanitaria está “fuera de control”.
En ese sentido, Chertorivski Woldenberg denunció que actualmente hay una falta de rectoría por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y un descoordinación con los estados lo cual ha empeorado este problema.
Por ello, presentaron un documento titulado “La gestión de la Pandemia en México”, con el que proponen medidas para mejorar la comunicación y la concientización de esta pandemia.
Asimismo, enfatizaron que si se siguen estas propuestas se podrá controlar esta pandemia en unas ocho semanas.
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La primera medida es concientizar a la población que será una epidemia larga para que no se relajen las medidas.
La segunda medida está la creación de Base de Datos Nacional para el seguimiento de rastreo y contactos, así como datos del número de fallecidos. Lo anterior permitirá una mejor toma de decisiones en materia de política sanitaria.
La tercera medida consiste en implementar una epidemiología de precisión, que consiste en el aumento de pruebas PCR para detectar zonas de alto contagio y rebrotes. El documento propone la realización de 127 mil semanalmente por ocho semanas.
La cuarta medida es la realización de una encuesta serológica a nivel nacional para hacer una estimación de la población que ha tenido el virus y por tanto, generaron anticuerpos.
En la quinta medida se propone un plan de ocho semanas para implementar las medidas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para poder controlar la epidemia.
La sexta medida consiste en una nueva política de comunicación sobre la enfermedad. El exsecretario declaró que no se puede continuar con la frase “si te sientes mal, quédate en casa”. Debido a esta estrategia, dijo, 79 por ciento de las personas que han fallecido no llegaron a los cuidados intensivos.
La séptima medida es mejorar y unificar la atención a los enfermos enfocando los recursos y esfuerzos de todos los especialistas del país.
La octava medida plantea una disciplina social con medidas determinantes como el uso de cubrebocas obligatorio y distanciamiento social, ya que estas medidas recaen en la población.
La novena medida propone un plan de coordinación entre las autoridades federales y estatales, encabezado por el Consejo de Salubridad General.
La décima medida plantea la necesidad de una política económica para quedarse en casa, debido a que las medidas de confinamiento no son suficientes por sí solas. “Se necesita plantear un ingreso mínimo vital para todos aquellos, sobre todo a los que se les pida confinamiento”, dijo Chertorivski.
En la onceava medida se señala la creación de un comité científico del más alto nivel para evaluar y dar seguimiento a las decisiones sobre la epidemia.
En la doceava medida sugiere una Ley de Cuarentena para establecer derechos individuales y colectivos, y obligaciones en una emergencia sanitaria. Dicha ley deberá ser discutida y en su caso aprobada por el Congreso de la Unión
En la treceava medida propone una campaña de vacunación extraordinaria contra la influenza para evitar una sindemia, es decir, el conjunto de más de una epidemia en el mismo lapso de tiempo.
Por último, plantea preparar logística de vacunación contra SARS-CoV-2: resguardo, distribución justa y eficiente de la misma.
Con información de La Razón y Diario 24 Horas
MSA
