Para solucionar el desabasto de medicamentos que se ha registrado en los últimos meses, un grave problema que él mismo originó por sus pésimas y equivocadas decisiones en el sector salud, el presidente Andrés Manuel López Obrador propuso la creación de una bodega en donde se almacenarán insumos médicos y se garantice su suministro constante en los centros de salud y hospitales de todo el país.
De acuerdo con el mandatario tabasqueño, en esta “mega farmacia” habrá “todas las medicinas del mundo” y estará operando en diciembre de este año.
“En dos o tres meses más vamos a tener una farmacia en la Ciudad de México donde van a guardarse y se van a tener todos los medicamentos, todos, no va a faltar ni uno, todos los medicamentos que existan en el mundo van a estar en esa farmacia”, declaró en octubre.
Y añadió: “De modo que si un centro de salud o en un hospital no hay un medicamento, se va a hablar a esa farmacia y en 24 horas va a llegar”.
Sin embargo, especialistas en temas de salud criticaron esta propuesta al señalar que no es viable.
Para ello, explicaron que la problemática del desabasto de medicinas en el país es más compleja y que no hay una logística para darle el manejo adecuado del inventario, ni para mantener el ciclo de vida de los medicamentos y que estos sean utilizados antes de caducar.
Por ello, calificaron esta “mega farmacia” como una ocurrencia, un disparate, “una burla y con dolo” de AMLO para los mexicanos, y que sólo refleja su nivel de ignorancia en este tema.
“Lo menos importante es crear una mega farmacia. Lo que se debe mejorar es la distribución de estos. El Estado ya concentró los medicamentos y se quedaron en un almacén ya que tuvieron problemas en la logística de la distribución. Además, el presidente no está tomando en cuenta que las medicinas tienen una fecha de caducidad y algunos requieren un manejo especial para su almacenamiento y distribución, tal es el caso de los que requieren cadena de frío para mantenerlos”, dijo Julio Copo, abogado especialista en derecho sanitario
“Es un falsa promesa para los mexicanos”
El doctor Xavier Tello, autor del libro La Tragedia del Desabasto, dijo que esta idea de Andrés Manuel es “un verdadero disparate y una ocurrencia”, además de que va en contra de cualquier lógica para eficientar los procesos.
“No se resuelve el problema así. No se trata de almacenar cosas, eso no resuelve nada. Se trata de tener gente experta en el manejo de medicamentos”, indicó y cuestionó cómo van a distribuir las medicinas a las clínicas del país.
Precisó que con su ocurrencia López Obrador reconoce el desabasto y lo que dice“es cómo me solucionan a mí mi problema, no cómo soluciono yo a los pacientes su problema”.
“Esto va en contra de un sistema, de lo que debería ser. Un sistema de salud debe garantizar que tengas salud, no debe poseer medicamentos. El gobierno no debería guardar medicamentos ni tener una sola aspirina en la mano, porque los medicamentos deben ser surtidos en la farmacia de la esquina”, especificó.
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El doctor Alejandro Macías, internista, infectólogo y divulgador de la ciencia médica, señaló que si bien la intención de lograr acabar con el desabasto de medicamentos es buena, un gran almacén no es la solución.
“Es poco probable que se puedan tener todos los medicamentos porque el inventario sería muy difícil de llevar en relación con las fechas de caducidad y las necesidades de distribución de los fármacos son diversas. Hay medicamentos que requieren condiciones específicas de transportación, de permisos, de recepción y más situaciones complejas que no resuelven un almacén central, por desgracia este no sería viable”, comentó.
El doctor Héctor Rossete sostiene que la propuesta del presidente es una “falsa promesa y burla hacia la población mexicana”, debido a que en el sector salud ha sido el más abandonado por el gobierno.
“No se requiere un almacén, se necesita comprar medicamentos. Se necesita invertir para abastecer las farmacias del sector público, pero a cuatro años de gobierno esto parece una burla para la población”, denunció.
“AMLO ha hecho cosas terribles en el sector salud”
Andrés Castañeda, coordinador del colectivo Cero Desabasto, interpretó la propuesta de López Obrador como “una falta completa de entendimiento” de lo que es el desabasto de medicinas , porque “las cosas son mucho más complejas”.
“Pudiera llegar a ser, inclusive, hasta una falta de sensibilidad con los pacientes que llevan meses, años, exigiendo que se garantice el derecho a la salud”, expresó.
El exsecretario de Salud y exrector de la UNAM, José Narro, resumió que “es una ocurrencia más” de AMLO.
Asimismo, dijo que lo que ha hecho en el sector salud “es terrible, muy grave, y no han querido tener apoyo de los conocedores. Se han equivocado en las múltiples y muy malas estrategias”.
“Es una muestra que de que López Obrador no tiene la remota idea de qué hacer”
La abogada Sonia Rocha, asesora legal de los colectivos ciudadanos Movimiento por la Salud y la Integridad Social; Quimios sí, Medicamentos sí; Movimiento Nacional por la Salud de Papás de Niños con Cáncer; Mamás y Papás de Niños con Cáncer de Diversos Hospitales del País; Fundación Nicoatole, Jusdena A.C.; Corazón de Niños A.C., entre otras asociaciones, consideró que la propuesta del presidente “no sólo es una ocurrencia, es una burla y con dolo”.
Indicó que “si por lo menos tuviera un control de lo que falta en cada clínica, en cada estado, pero no lo tiene; por eso creo que es una burla y que además lo hace con dolo. Si no ha podido siquiera hacer la compra consolidada, no ha podido garantizar la distribución de las quimioterapias, promete que ya van a llegar y no llegan, y a las denuncias de los colectivos ciudadanos responde con descalificaciones”.
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Por último, el doctor Éctor Ramírez Barba, diputado federal del PAN y secretario de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, opinó que el presidente “no sabe lo que está diciendo, queda claro que no tiene la más remota idea, pues no es como la Bimbo que puede repartir por el país. De hacerlo, sería el más grave error, pues los medicamentos caducan, requiere de un sistema frío, por decir lo menos”.
“Es una muestra que ni el presidente ni sus colaboradores saben que eso se planea. Yo creo que es una ocurrencia que no puede ser sustentada, es un semejante despropósito, las mermas serían impresionantes. Es una verdadera barrabasada. ¿A ver, cómo llevas el medicamento a la más lejana sierra de Guerrero?”, remarcó.
Y agregó: “Yo fui director de un hospital regional del ISSSTE y para un almacén se programa, se señala lo que más se necesita, el paquete de servicios que se van a entregar, se conoce la demanda y hoy el gobierno no hace nada de eso”.
Con información de El Financiero, El Universal y La Silla Rota
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