Las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador han sido muy criticadas debido a su pobre contenido comunicativo, la nula seriedad, la falta de datos veraces y porque ha sido una plataforma con la cual se lanzan descalificaciones y ataques en contra de los enemigos políticos de la 4T.
Sin embargo, algunos especialistas señalan que ‘las mañaneras’ han sido un rotundo éxito como medio propagandístico; de acuerdo con la analista Catherine Fieschi existen cuatro claves que vuelven exitosos tanto estas conferencias de AMLO como los discursos populistas:
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La simplicidad
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La inmediatez
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La transparencia
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La autenticidad
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En el primer punto, López Obrador manda mensajes exclusivamente a su base de seguidores; para ello, en vez de proporcionarles información sólo les da un relato sencillo de cómo es su trabajo y con recursos retóricos hace señalamientos contra los “villanos” del pueblo.
Como ejemplo están las frases como “empresarios rapaces”, “intelectuales hipócritas”, “prensa vendida”, “tecnócratas neoliberales”, etc.
En el segundo punto se confirma una creencia política: que sólo se requiere de un presidente para solucionar los problemas del país.
Por ello, sus seguidores observan las conferencias matutinas para enterarse de cuáles son los problemas que hay en México y cuáles son los planteamientos que propone López Obrador para solucionarlo.
Como ejemplo, tenemos la frase de AMLO quién ha señalado en algunas ocasiones que “gobernar no tiene mucha ciencia”.
En el tercer punto, la especialista señala que Andrés Manuel volvió sus ‘mañaneras’ en un reality show en donde todas los días el mandatario tabasqueño responde, se defiende, se enoja, se burla, se ríe, insulta, regaña, acusa, absuelve, da instrucciones y toma decisiones frente a las cámaras y micrófonos; lo cual les hace pensar a sus seguidores que no les está ocultando nada.
En ese sentido, a las personas que observa sus conferencias no le importan si las decisiones que toma desde Palacio Nacional son correctas o no, para la audiencia sólo le basta saber que se está “gobernando en vivo”.
En el último punto, Fieschi señala que existe un vínculo sentimental entre AMLO y sus seguidores el cual se refuerza cuando hace descalificaciones en contra de las élites.
Con ello, Andrés Manuel tiene la autorización de decir “mentiras escandalosas”.
Pese a que la sociedad sabe que todo lo que dice AMLO en sus ‘mañaneras’ es información falsa, a sus seguidores sólo les interesa que con esas “mentiras escandalosas” se pone “en su lugar” a los “enemigos del pueblo”.
Con información de The Washington Post
MSA
