Desde que la CNTE en Oaxaca comenzó a circular el rumor de que no cesarían su protesta a pesar de que la Guelaguetza –uno de los eventos más importantes para el estado– estaba en puerta, los prestadores de servicios turísticos de la entidad comenzaron a reportar números rojos, y es que la fuente de ingresos más grande para los pobladores del estado proviene de los turistas.
En entrevista para La Otra Opinión, el periodista de Oaxaca Roberto Molina explicó que los visitantes que acudieron al festival son locales, es decir que de cualquier forma la economía del estado sigue paralizada.
El entrevistado reiteró que debido a la poca afluencia de gente, muchos negocios ubicados en el centro de la capital oaxaqueña quebraron debido a que los turistas se han alejado del estado por la anarquía y la ingobernabilidad ocasionadas por la CNTE y sus bloqueos.
Por otro lado, Roberto Molina añadió que la Coordinadora ha atrofiado el sistema educativo de Oaxaca y recordó que en 33 años los ciclos escolares en la entidad no han podido concluirse, el motivo: el mal manejo de la disidencia sobre los recursos y el tiempo destinado a la enseñanza.
Sin embargo, a pesar de no dar clases, los maestros siguen cobrando sueldos y al final del año reciben el aguinaldo correspondiente a 90 días de labores.
Además, Molina señaló que cerca del 80 por ciento de los maestros no tiene título.
“Muchos de ellos fueron hechos al vapor. Muy pocos son de carrera”, aseguró el periodista.
