Crimen de odio en Orlando; intolerancia en México

La imagen de hoy es un mosaico de tristeza y desesperanza.

Los sobrevivientes y familiares de la masacre en el Bar Pulse –en Orlando, Florida–; se abrazan e intentan digerir lo que acaba de pasar.

Como sabe, un radical islámico –de 29 años de edad–, acudió a este bar gay y abrió fuego contra los asistentes

En total, 50 personas perdieron la vida –tres de ellos mexicanos– y otros 53 resultaron lastimados.

Según parece, asistimos a uno de los crímenes de odio más dolorosos en una década.

Y es que, de acuerdo con las primera versiones, atrás de la masacre estarían la intolerancia, el fanatismo religioso y el odio por todo lo que parece distinto.

Ahora bien, mientras que muchos se solidarizan, se conmueven, se horrorizan y se sorprenden con los hechos de Orlando; pocos se detienen a pensar, ¿podríamos ver un hecho similar en México?

Seguramente ha escuchado a líderes religiosos calificar al matrimonio igualitario como un “derecho falso”.

De igual manera, amplios sectores del PRI insisten en crecer la versión de que el apoyo del presidente al matrimonio igualitario habría ocasionado las derrotas electorales del 5 de junio.

Estos argumentos –que están muy lejos de la realidad–; se suman al discurso de odio y a la intolerancia latentes en la sociedad mexicana.

Es decir, que al legitimar –desde la religión y desde la política– el rechazo a las uniones homosexuales; también se normaliza el repudio a la diversidad.

O si lo prefiere, también se justifica la intolerancia de quienes no aceptan estas prácticas.

Por eso, aunque la masacre de Orlando está muy lejos de la realidad mexicana; no está de más preguntar, ¿qué diferencia existe entre la intolerancia de un radical religioso y la de una iglesia que llama a movilizarse en contra del matrimonio igualitario?

¿Qué distingue las acusaciones del priismo –que utilizan el matrimonio igualitario como chivo expiatorio– de los que justifican los hechos violentos del domingo con argumentos anclados en la corrección política?

¿Los llamados de la iglesia y las justificaciones del PRI son la semilla de la intolerancia que brota en tragedias como la del Bar Pulse?

Por cierto, sí ha ocurrido en México algo parecido. ¿Se acuerda de la matazón en el bar gay “la Madame” en Veracruz? ¿ese hecho no nos indignó?