Este lunes, el Congreso de Tabasco avaló en lo general las reformas al Código Penal del estado, de la llamada “ley garrote”, que contempla que se castigue con prisión de hasta 20 años el impedimento de ejecución de trabajos y obras con bloqueos.
Una de las modificaciones fue la reducción del artículo 308 bis, donde se acotaba sancionar cualquier movilización que obstruye el libre el tránsito, para delimitar su aplicación solo a protestas que “extorsionen” en busca de plazas o contratos de trabajo.
Cabe señalar, que los representantes del PRI encabezados por su coordinador Gerald Washington Herrera Castellanos abandonaron la sesión justo cuando se sometió a votación del pleno, misma que fue aprobada con 26 votos a favor y una abstención.
Mientras tanto, los diputados de Morena se mostraron complacidos con las modificaciones realizadas a la propuesta que envió el gobernador Adán Augusto López, pues a su consideración se pondrá freno a los “seudo sindicatos” que bloquean accesos o interfieren con el trabajo de empresas en Cárdenas o Paraíso, que es donde se construirá la refinería.
Por su parte, los legisladores de oposición se pronunciaron en contra de dicha ley, ya que contraviene al principio de libre manifestación, pero para este caso en particular se limita a aquellas que representen un problema adicional con bloqueos.
