En el discurso con la 4T “todo mejora”, pero en los hechos el kilo de limón sube hasta 80 pesos, lo que significa un duro golpe para los bolsillos de las familias mexicanas.
Algunos mercados del país ofrecen dicho precio por una caída natural en la producción de cítricos.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) indicó que el limón agrio con semilla, conocido como Colima, reportó del 3 al 9 de enero precios de entre 39.90 hasta 75 pesos el kilo, aunque el precio promedio fue de 60.20 pesos el kilo.
Respecto al limón persa sin semilla, la Profeco lo encontró entre los 20 y 69 pesos el kilo, con un precio promedio de 40 pesos el kilo, tanto en mercados como tiendas de autoservicio.
No obstante, este 11 de enero se observaron precios de hasta 80 pesos el kilo en mercados de la Ciudad de México como San Joaquín de Peralvillo.
Ante esta situación, el director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, Juan Carlos Anaya, explicó que los altos precios son resultado de que terminó el ciclo de producción de limón en el país.
“El precio del limón con semilla se mantiene alto, postura que se ha observado durante las últimas semanas. La oferta actual es baja, en parte porque en algunas entidades productos concluyó el ciclo productivo”, dijo.
Otra de las problemáticas que ha influido en el aumento del precio del limón, es que se suscitaron algunos problemas como en el que Michoacán, principal abastecedor del país, donde se presentaron eventualidades de fitosanitarios y una menor producción.
Por un lado, la inflación que encarece todo, mientras que con la 4T todo mejora, pues el kilo de limón sube hasta 80 pesos, un nuevo golpe a los bolsillos de los mexicanos.
Con información de El Universal
JZ
