Para garantizar el éxito de la Reforma Educativa sería fundamental aplicar las leyes que de ella emanan. Por ello, el anuncio de las autoridades educativas de que se aplicarán sanciones a los maestros faltistas de la CNTE —que se encuentran en paro de labores desde el pasado 15 de mayo— puede ser visto por muchos como un primer paso para la normalizar la actividad en las escuelas y poner fin al conflicto magisterial.
Y es que de conformidad con lo estipulado en la Ley General del Servicio Profesional Docente, la Secretaría de Educación Pública (SEP) procederá a sancionar a 44 mil 486 maestros que no acudieron a laborar durante la primera semana de clases del ciclo escolar 2016-2017.
De acuerdo con cifras oficiales proporcionadas por la SEP y las autoridades educativas locales, se ha iniciado de manera formal el proceso para destituir a 1255 docentes y aplicar descuentos salariales a otros 43 mil 231 en Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Michoacán a causa de su absentismo laboral en el marco de las manifestaciones de la CNTE en contra de la Reforma Educativa.
Los profesores faltistas contarán con un periodo de 10 días para justificar la ausencia de sus puestos de trabajo, mientras que las autoridades tendrán otros 10 para determinar si las faltas son o no excusables. A reserva de que las autoridades consideren la participación en actos vandálicos, marchas, plantones, protestas, bloqueos y “boteos” como una justificación legítima para coartar el derecho a la educación, los despidos y descuentos podrían llegar en grandes cantidades. Guerrero será la entidad con más procesos de despido iniciados: mil 339, en tanto que en Guerrero podría haber 16. En cuanto a los descuentos salariales, serían 41 mil 569 los profesores sancionados en Chiapas y mil 662 en Michoacán.
Pero, ¿Será capaz la SEP de aplicar la ley? Por más que las sanciones estén fundamentadas en la ley, los maestros adheridos a la CNTE han demostrado su total falta de respeto a las normas. Además, se aprecia complicado que acepten las consecuencias legales de la reforma que intentan “tirar” porque afecta sus intereses.
De cualquier forma, las destituciones y sanciones económicas a quienes infrinjan la Ley General del Servicio Profesional Docente es para muchos un primer paso para garantizar a los niños de Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Michoacán el derecho a la educación que hasta ahora la CNTE a lesionado.
Asimismo, el que para muchos sería el segundo paso para normalizar la situación educativa ya ha comenzado a darse: ante la presión de padres de familia de siete comunidades en Oaxaca, Germán Cervantes, titular del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), anunció que ya se contempla sustituir a los profesores que podrían ser despedidos. Mencionó que ya se cuenta con 950 aspirantes a ocupar una plaza en el servicio docente, de los cuales 500 podrían comenzar a trabajar de manera inmediata. ¿Será este el inicio del fin de la carrera magisterial de varios profesores adheridos a la CNTE?
