Este jueves, cerca de 46 millones de personas votarán en Reino Unido por la permanencia o la salida de dicha nación de la Unión Europea.
Nunca, ningún país ha abandonado el organismo compuesto por 28 países; mismos que –en su mayoría– están en contra del llamado “Brexit”.
En esta lógica, quienes están a favor de que Reino Unido permanezca en la Unión Europea señalan que es lo más conveniente debido a que la nación puede vender bienes y servicios a otros países de manera sencilla.
Los que están en contra consideran que la permanencia es un impedimento para el país, el cual entrega más de lo que recibe. Además argumentan que las regulaciones europeas dañan a las empresas británicas.
Para este bando es necesario que Reino Unido tenga un control completo sobre sus fronteras y de este modo disminuir el número de migrantes. También afirman que la economía inglesa es lo suficientemente sólida como para mantener acuerdos con la Unión Europea –que les den la garantía de un mercado libre– a pesar de no estar vinculados al movimiento sin restricciones de extranjeros.
Por su parte, los que quieren permanecer insisten en que la salida provocará una crisis económica ocasionada por la disminución de inversión extranjera.
A propósito del tema, en La Otra Opinión platicamos con la Doctora Martha Ochmann, especialista en temas de la Unión Europea y profesora de la Escuela de Gobierno del Tec de Monterrey. La académica recordó que en 2015, durante la elección en Reino Unido, los candidatos se comprometieron a que los ciudadanos podrían decidir si quieren quedarse –o no– en la Unión Europea.
El objetivo de esta promesa fue ganar electores. De modo que, con el triunfo del abanderado conservador, David Cameron, el referendo se convirtió en una realidad y mañana –jueves– se hará efectiva su palabra.
De acuerdo con la Doctora Ochmann, desde las campañas del año pasado, las opiniones en Reino Unido están empatadas. Sin embargo, destacó que los argumentos para ambas partes se basan en el miedo: miedo a la migración, miedo a la crisis económica, miedo a la inflación, y un largo etcétera.
La especialista concluyó advirtiendo que si Reino Unido sale de la Unión, es posible que los mercados caigan, aunque no de manera catastrófica como muchos anticipan. Además agregó que esta decisión provocaría la devaluación del Euro y de la libra esterlina; es decir, que se mantendría la devaluación del Peso mexicano.
