Amnistía Internacional (AI) mostró su preocupación por la militarización de la seguridad pública que impulsa el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
En una carta dirigida a Antony Blinken, secretario de Estado de los Estados Unidos; y a Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la organización señaló que aprobar el traspaso de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) deja al país sin policía civil y otorga las tareas policiales federales exclusivamente a instituciones militares.
“Dicha reforma contradice los estándares internacionales de derechos humanos y desconoce más de 15 años de evidencia que muestra el fracaso de la militarización como estrategia para controlar la violencia”, expuso.
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Por otro lado, recordó que las Fuerzas Armadas de México han cometido numerosas violaciones de derechos humanos en años recientes, generalmente sin rendir cuentas.
Pese a estos señalamientos, el gobierno de López Obrador ha asignado cada vez más papeles, tareas y recursos a las instituciones militares.
“México no está priorizando debidamente la consolidación de instituciones civiles de seguridad y justicia capaces y confiables, aun cuando éstas representan el único camino sustentable hacia un mayor acceso a la seguridad y la justicia”, denunciaron.
Con información de La Razón
MSA
