Alerta roja en el proceso electoral

Agustín Basave nos compartía ayer de sus temores y preocupaciones frente a lo que se avecina en este país con motivo de los comicios presidenciales del primero de julio.

“No preveo un escenario poselectoral tranquilo, veo turbulencias…”, dijo el expresidente nacional del PRD, recién nombrado presidente de la Segunda Comisión de la Permanente.

La víspera, Yeidckol Polevnsky nos habló de la incontenible violencia en el proceso electoral en curso.

“Van sesenta y pico candidatos asesinados o más (son 79)”, hizo notar la presidenta nacional de Morena.

La tarde de ayer, los principales portales fueron portadores de la noticia del asesinato del candidato a diputado local del PRI y alcalde con licencia del municipio guerrerense de Coyuca de Catalán, Abel Montufar Mendoza.

Hay reportes que dan cuenta de amenazas previas en contra de Montufar Mendoza. Apenas el pasado domingo el candidato priista canceló su arranque de campaña por temor a que se produjera un atentado en contra suya.

Pero ni él —iba sin escoltas— ni las autoridades tomaron medidas precautorias, lo cosieron a balazos y lo dejaron con los pantalones abajo.

Sólo en Guerrero van 18 abanderados ejecutados en 2018, de acuerdo con cifras oficiales.

Ya lo dijo el ombudsman Luis Raúl González Pérez: “Las autoridades han sido rebasadas, sus estrategias anuladas y su control disminuido al límite”.

Y más: “El proceso electoral no ha estado exento de violencia, como lo ha evidenciado la serie de asesinatos en contra de candidatos a puestos de elección popular o miembros de institutos políticos que están lejos de resolverse”.

  • Donde sí le dieron un trancazo al crimen organizado fue en San Martín Texmelucan, uno de los tres municipios más importantes de Puebla.

Como resultado del operativo realizado en esa zona por las policías Federal y Estatal, y elementos de la Zona Militar 25, fueron detenidos 185 policías municipales, según datos de la Secretaría de Gobierno de Puebla.

De ese total, 136 fueron presentados a la Fiscalía y posteriormente internados en el Cereso de Tepexi bajo cargos de usurpación de funciones, corrupción, cohecho, incluido el comisario y el director general de la Policía.

El operativo se llevó a cabo en virtud de que el gobierno municipal no garantizaba la seguridad y el patrimonio de los habitantes.

En las últimas semanas aparecieron seis descuartizados —familiares de regidores— con mantas que hacían referencia al Cártel Jalisco Nueva Generación.

Se registraron también permanentes confrontaciones de bandas de “chupaductos” (la del Loco Téllez) con el Ejército.

Sabemos que el gobierno de Tony Gali va sobre el presidente municipal de San Martín Texmelucan, Rafael Núñez.

Era el que firmaba la contratación y equipamiento de los policías que no tenían registro en la plataforma policial y, por supuesto, no contaban con el control de confianza.

El Operativo Texmelucan forma parte de la estrategia acordada entre el gobierno federal y el estatal para combatir las bandas de robo de combustible, robo en carreteras y robo de trenes que operan a lo largo de lo que se conoce como el Triángulo Rojo.

Ese triángulo lo integran los municipios poblanos de Amozoc, Tepeaca, Acatzingo, Quecholac, Tecamachalco, Palmar de Bravo, Ciudad Beltrán y, ahora, Texmelucan.

  • La que reapareció en un evento de José Antonio Meade fue Alejandra Sota. La exvocera de Felipe Calderón se puso la chamarra roja y le sirvió de chofer al candidato de la coalición Todos por México, quien presidio una reunión con más de 300 integrantes del Organismo Nacional de Mujeres del PRI, que preside la senadora Hilda Flores Escalera.

Las ausencias de Alejandra en la casa de campaña eran notorias. En algunas columnas ya la daban por muerta, ahogada por el resurgimiento del orgullo priista.

Le preguntamos a Alejandra las razones de su prolongada ausencia. “He tenido un problema de salud en las últimas semanas”, nos dijo.

Y más: “Eso combínalo con la típica mala leche del fuego amigo, que más bien es enemigo…”, respondió vía WhatsApp.

  • La periodista Mariana Escobedo, 42 años, superó un cáncer de ovario. Hoy vive para contribuir al combate de esa terrible enfermedad que diario mata a siete mujeres en México. El número de muertes sólo es comparable con los feminicidios. Es la fundadora de la iniciativa ciudadana #SiTienesOvarios.

Nos la topamos ayer en la sede del Senado de la República. Iba acompañada de la conductora de Canal 22 Laura Barrera.

Era el Día Mundial del Cáncer de Ovario y querían aprovecharlo para pedir a los legisladores que suscriban una carta compromiso con organizaciones sociales para realizar auditorías al presupuesto del Seguro Popular, a fin de conocer los gastos que realiza en materia de detección y cáncer de ovario.

El tratamiento de la enfermedad es muy costoso hasta para las mujeres con recursos.

Las dos mujeres nos dieron un documento en el que anuncian la creación de un Observatorio Ciudadano que dé seguimiento puntual a las propuestas de los cinco candidatos presidenciales en materia de salud.