La “Cuarta Transformación” continúa con los recortes a diversos programas sociales y en esta ocasión le tocó al Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), por lo que en los próximos días podrían quedarse si recursos las 24 Casas de la Mujer Indígena CAMIS.
En dichos lugares se atienden padecimientos con parteras tradicionales y también cuentan con un programa para prevenir la violencia contra la mujer indígena, pero sin recursos se podrían ver afectadas cerca de seis millones de féminas pertenecientes los pueblos originarios.
Para representantes, organizaciones académicas y dirigentes indígenas esta decisión del gobierno de Andrés Manuel López Obrador es “inadmisible”.
De acuerdo con varios reportes, el recorte presupuestal que sufrirán las CAMIS —y/o el INPI— llegaría a ser del 75 por ciento; en consecuencia corre el riesgo de desaparecer el único programa que atiende a mujeres indígenas en sus derechos sexuales y reproductivos, que previene la violencia de género y las respalda en las urgencias de violencia en casa, mismas que han aumentado por la pandemia.
Por medio de una carta que firmaron más de 100 representantes, la Red de Casas de la Mujer Indígena solicitó la intervención de la secretaria de Gobernación (Segob) y presidenta de la Comisión Nacional para la Atención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM), Olga Sánchez Cordero, para que se rescate la iniciativa.
Los firmante manifestaron que Sánchez Cordero puede evitar la desaparición de las CAMIS, pues ella sabe que son las únicas instancias de atención a las mujeres de pueblos originarios en momentos tan cruciales como su salud reproductiva, sus derechos humanos y eventos de violencia.
Cabe señalar que los recursos para la operación de los refugios —que existen desde hace 17 años— se avaló y etiqueto por la Cámara de Diputados en el Presupuesto de Egresos de la Federación.
Sin embargo, ese no es el único problema que enfrentan el INPI ya que batalla con un retraso en los recursos, que de por sí son escasos, al grado de que la mayoría de las CAMIS debe operar al mes con solo 12 mil o 14 mil pesos al mes; esto en zonas de muy alta marginación como Oaxaca, Chiapas, Yucatán, Puebla, Hidalgo, Veracruz, Querétaro, en San Quintín, Baja California, en Michoacán, Sonora, Guerrero y Nuevo León.
Lamentable que la administración obradorista decida quitarle recursos a programas que benefician a las mujeres de los pueblos originarios, sobre todo en tiempos de emergencia sanitaria, donde los casos violencia en contra de ese sector han aumentado considerablemente.
Con información de SEM México
