A estas alturas, a nadie debe sorprender que Martí Batres, presunto dirigente nacional de Morena, busque engañar a la población.
Con la desvergüenza que caracteriza a este exvendedor de leche contaminada, Batres salió con el cuento de que el Gobierno del Distrito Federal y el PRD buscan modificar la tarifa del Metro.
De acuerdo con el gerente de Morena, las autoridades capitalinas buscarían aplicar una tarifa diferenciada en el Metro para habitantes de la Ciudad de México y para los originarios del Estado de México. En la cabeza de Batres, estos últimos pagarían una cantidad mayor que los defeños; por ello, el justiciero Martí anunció que su partido iniciará una “campaña informativa” entre mexiquenses para combatir la imaginaria alza de las tarifas.
Y decimos que “imaginaria” porque, hasta el momento, ni el PRD, ni el STC Metro y menos el jefe de gobierno Miguel Ángel Mancera han anunciado, formalmente, tales modificaciones. Todo está en la cabeza de Martí que, como su jefe, “tiene otros datos”.
Por su parte, Jorge Gaviño, director del STC Metro, negó las versiones delirantes de Martí y acusó que “el aumento del Metro es un fantasma que está en la cabeza de quien lo dice con fines políticos”. Y en eso, al parecer, Gaviño tiene razón.
Y ésta no es la primera vez que Martí Batres y Morena tratan de crear conflicto y aplicar el dicho de que “a río revuelto, ganancia de pescadores”.
Sólo como ejemplo, basta recordar que en abril pasado, a un par de meses de las elecciones, los morenos inventaron el cuento de que en la delegación Coyoacán una fuerza extraña se encontraba robando niños, a pesar de que nunca se reportó un solo infante desaparecido. Pero fue cuestión de días para que se derrumbara la mentira y se supiera que los encargados de difundir los falsos rumores del supuesto robo de niños eran dos operadores de Morena vinculados a la entonces candidata a jefa delegacional de Coyoacán, Bertha Luján.
Así, ¿alguien puede decirse sorprendido de las mentiras engañabobos de Martí Batres?
