De acuerdo con Jesús Ramírez Cuéllar, presidente interino de Morena, dentro del partido oficial ya no hay pleitos internos, y, en unidad, avanzan en el proceso de renovación de la dirigencia, donde se garantiza “piso parejo” para todo los militantes que decidan participar.
“Avanzar; hay una especie de animación, hasta cierto punto de euforia, porque ya dejamos atrás los pleitos, en todos los estados está saliendo la militancia masivamente a asistir a las asambleas informativas y hay el compromiso de que este partido vuelva a ser muy grande”, dijo el líder nacional.
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En comparecencia ante medios de comunicación, después de reunirse con senadores de Morena, Ramírez Cuéllar sostuvo que dicha fuerza política actuará en un solo sentido, que será el diálogo.
“Va a ser un partido muy grande, vamos a incorporar todos los puntos de vista, mucho diálogo”, agregó.
Respecto a las reglas para la elección del nuevo dirigente nacional, el legislador con licencia, señaló que ese tema se consultará con todos los militantes, para que no haya confusiones y privilegios como sucedió en el pasado.
“Imparcialidad absoluta, piso parejo, todo eso, fueron los compromisos y lo vamos a llevar a cabo. Entre todos vamos a hacer la ruta para entregarla al tribunal (TEPJF), porque el viernes tenemos que presentar las propuestas de los caminos, las actividades, las fechas, pero esto no lo quiero hacer solo, sino con mis compañeros senadores, mis compañeros diputados y con el Comité Ejecutivo”, expreso.
Mientras Yeidckol Polevnsky no mueva nada puede haber cierta calma en Morena, pero en cuento ella lleve a cabo algo, la incipiente “paz interna” se puede venir abajo, ya que todavía hay militancia que la respalda.
Con información de Milenio
