El gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el que asegura no “guardarse nada” y ser transparentes, vuelve a ponerle candado a un expediente de información pública. Esta ocasión se trata del apagón ocurrido el pasado 28 de diciembre que afectó a más de 10.3 millones de personas en 12 estados.
De acuerdo con El Universal, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) reservó por dos años la información, y su justificación a la solicitud fue al señalar que, a pesar que han pasado dos meses del hecho, aún no hay un dictamen final, por lo que entregar la información implicaría un daño al darse a conocer datos que todavía no son oficiales.
Argumentó que dar a conocer dicha información podría incidir en la conclusión de este proceso sin que pudiera derivar en “un movimiento o revuelta social que pone en riesgo la seguridad nacional”.
“Proporcionar la información o documentación que se solicita implicaría brindar datos e información que aún se encuentran en periodo deliberativo, es decir, que no ha concluido el proceso de investigación o se ha arribado al dictamen final, representando con ello proporcionar información inconclusa que de ser divulgada repercutiría en el proceso deliberativo mismo, ya que al contar con la información no conclusiva el solicitante pudiera llegar a reproducirla y con ello generar un movimiento o revuelta social que pone en riesgo tanto el orden como la seguridad social, mismos que forman parte del interés público, y que de igual forma pudieran, por presión social, influir en la conclusión del citado proceso deliberativo.
Es de esta forma como el Comité de Transparencia de la CFE determinó la reserva sobre estos documentos por dos años, por lo que será hasta el 23 de febrero de 2023 cuando se conozca qué pasó con el apagón del pasado 28 de diciembre.
Con información de El Universal
AIS
