Vuelve PVEM con su propuesta de pena de muerte en México

En medio de la violencia que se vive en el país y en pleno proceso electoral, el Partido Verde impulsa nuevamente su propuesta de pena de muerte para quienes cometan, secuestro, violación u homicidio.

El dirigente nacional del PVEM y Coordinador de su Grupo Parlamentario en el Senado de la República, Carlos Puente Salas, expresó que su partido no tiene temor a la crítica por su postura.

Puente explicó que la pena de muerte, sólo aplicaría para personas condenadas por el delito de secuestro, violación u homicidio doloso.

Desde el año 2009, el Partido Verde ha intentado imponer la pena de muerte como un castigo en México. En ese año, utilizaron el slogan “Porque nos interesa tu vida, pena de muerte para asesinos y secuestradores”, con la promesa de que era una nueva opción para el votante.

El Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México presentó el día 19 de febrero de 2009 en la Cámara de Diputados su iniciativa para implementar la pena de muerte en el país, misma que fue enviada a comisiones.

Sin embargo, los grupos parlamentarios del PRI, PAN y PRD dijeron entonces que la iniciativa no tenía futuro, “porque no permitirán la reinstauración de la pena de muerte, aunque eso no cancelaba su disposición al diálogo”, según datos de la Cámara de Diputados en su LX Legislatura.

En México, la pena de muerte era aplicada desde tiempos prehispánicos como resultado de cometer faltas graves. Fue en Coahuila, en 1961, que se realizaron las últimas ejecuciones en nuestro país, aunque en la Constitución aún se leía hasta el 2005 cuando fue abolida por el expresidente Vicente Fox.

Actualmente, México tiene ya 57 años sin ejercer la pena de muerte. La última vez que se aplicó la fue a Isaías Constante Laureano en 1961, un soldado de Infantería en Saltillo, Coahuila.

Un caso emblemático fue el del padre Miguel Agustín Pro Juárez en la década de los 20, durante la llamada Guerra Cristera. Sin ser culpable de un atentado contra el general Álvaro Obregón, que en realidad cometió uno de sus hermanos, y al cual se le vinculó, fue fusilado “para hacer justicia”, durante el mandato de Plutarco Elías Calles.

Varias voces en México se han pronunciado en contra de la pena de muerte, al argumentar que la delincuencia no puede combatirse con su aplicación, porque nadie ha podido demostrar que esa acción punitiva, que se aplica en Estados Unidos, “disminuya la criminalidad”.

– Juan Manuel Gómez Robledo, exsubsecretario para Asuntos Multilaterales de la SRE. “México se opone a la pena muerte, por considerar que no está demostrado, en ninguna parte del mundo, que contribuya en lo más mínimo a reducir los índices de delincuencia”.

– Sandra Babcock, abogada. “… surge el tema de si el detenido es o no responsable del delito que se le imputa. Es aquí donde podemos decir, categóricos, que ningún delito está por encima de su derecho a vivir”.

– Alberto Herrera Aragón, director de Change.org México. “El derecho a la vida está por encima de cualquier cosa”.

Hoy, tenemos una propuesta más que pareciera ocurrencia, y que únicamente busca el voto explotando el coraje de la sociedad. La propuesta del Verde no es tan distinta a la de “mochar” manos y “azotar” a delincuentes, como el caso del candidato independiente, Jaime Rodríguez Calderón.

Bajo la pena de muerte seguramente fallecieron y siguen muriendo innumerables personas inocentes en todo el mundo. Con el sistema jurídico que nos rige actualmente, es probable que si reapareciera tal castigo, pagarían justos por pecadores.

Asimismo, organismos como Amnistía Internacional reportan que en países como Estados Unidos, por ejemplo, a pesar de la aplicación de la pena de muerte, no ha logrado disuadir el crimen.