De nueva cuenta millones de peregrinos acudieron a los alrededores de la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México por motivo del aniversario de la Virgen de Guadalupe y con ellos también llegó el maltrato a cientos de perros que acompañan las peregrinaciones.
Y es que parece que por más que las autoridades adviertan cada año sobre el alarmante número de caninos que quedan abandonados por los creyentes, el fenómeno sucede nuevamente por lo que los rescatistas se ven superados.
Hasta el momento, autoridades capitalinas no han establecido sanciones para quienes abandonen a sus amigos perrunos pues sería muy complicado identificar a los responsables, sin embargo, habrá que hacer más conciencia pues cientos de ellos mueren en el camino, llegan deshidratados, sin comer o hasta terminan atropellados.