Fabiola, una mujer migrante originaria de Haití, suplicó entre lágrimas tirada en el piso desde el centro de detención habilitado por el Instituto Nacional de Migración (INM) en las instalaciones de la Feria Mesoamericana, que la ayudaran porque su hijo se encuentra enfermo desde hace días.
De acuerdo con El Universal, hombres y mujeres migrantes intentaron salir de las instalaciones por la desesperación de que sus hijos están enfermos y no cuentan con medicamentos, sin embargo, elementos de la Secretaría de Marina (Semar) habilitados como Guardia Nacional y la Policía Federal se los prohibieron.
Según con las versiones de algunos testigos, contaron que guardias privados vestidos de blanco los golpearon y maltrataron.
Te puede interesar | La 4T multiplica la detención de migrantes
“Los de blanco les estaban pegando con el cincho a los negritos. Yo soy extranjero, pero eso que les hacen está mal”, dijo uno de los migrantes que se encontraban en el lugar.
De igual forma, las cámaras de dicho medio, captó la imagen de una mujer haitiana que se identificó como Fabiola, tirada en el piso junto al portón y entre lágrimas, suplicando ayuda para su hijo Pablo Andrés , de un año de edad, quien, dijo, presentaba ronchas de picaduras de zancudo en todo su cuerpo.
“¡Justicia, por favor! ¡Diez días sufriendo, ayúdame, la policía me pegó!, denunció, mientras militares y guardias privados pateaban piedras, sobre la cámara para evitar que se documentaran las protestas.
Con información de El Universal.
