Falta de mantenimiento y fallas en las inspecciones provocaron el desplome de una trabe de la Línea 12 del Metro. Así lo señala el tercer informe de la empresa DNV sobre colapso de la L12 que el gobierno de la Ciudad de México se negó a hacer público.
El diario El País fue quien hizo públicos los resultados del tercer informe de DNV, que fue contratada por el gobierno de la CDMX para determinar los qué provocó la caída del tramo elevado, entre las estaciones Olivos y Tezonco; sin embargo, de último momento, se negó a que se hicieran públicas las conclusiones al calificarlo como “tendencioso” y con una modificación en su “metodología”.
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¿Qué dice el tercer informe de la L12?
Así, la fase tres del peritaje sobre el accidente pone acento en que se generó un desgaste estructural, producto de la falta de revisiones periódicas para evaluar el estado de la obra y una ausencia de mantenimiento.
En este sentido, según el informe, los problemas se acumularon y la Línea 12 continuó con su operación, pese a que no estaba en condiciones para seguir con su funcionamiento.
El contenido analiza hechos que abarcan a las tres administraciones que estuvieron a cargo de la línea: la de Marcelo Ebrard (2006-2012), que la construyó; la de Miguel Ángel Mancera (2012-2018), bajo la cual atravesó una suspensión de un año y medio entre 2014 y 2015 ; y la actual, de Claudia Sheinbaum, que arrancó en 2018 y concluirá en 2024.
De acuerdo con DNV, el colapso ocurrió como resultado del pandeo de las vigas Norte y Sur facilitada por la falta de pernos funcionales a lo largo de una longitud significativa de las vigas, lo que ocasionó que una porción del puente elevado perdiera su estructura compuesta.
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Tragedia que pudo evitarse, según DNV
DNV apunta que existen cuatro aspectos capaces de la prevención del desplome del servicio de transporte:
- Primero, el diseño, que presentó problemas en la construcción de puentes por no adecuarse a los estándares estadounidenses estipulados sobre esta clase de obras. Señala que no se respetó el diseño original, de acuerdo con las bitácoras a las que accedieron los responsables del informe sobre la Línea 12 del Metro.
- Segundo, señala que existió una deficiencia en la certificación de la obra del servicio de transporte, pues no se contempló a un organismo independiente que diera su opinión sobre las características de la construcción. Además, no existió una correcta supervisión del proyecto.
- Tercero, señala la empresa DNV, dentro de los elementos para evitar un accidente, se encuentra en la instalación correcta de los pernos, algo que ya de había señalado con anterioridad como una de las causas.
- Cuarto, refiere que en cuanto a la revisión del 2019, no fue un proceso significativo y concluyente, pues el periodo en el que se llevó a cabo fue reducido, con una muestra que carece de representatividad.
AIS
