En los últimos días tanto la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, como AMLO, han dedicado su tiempo a señalar una supuesta censura por parte del INE a la mandataria capitalina y psobile candidata presidencial de Morena.
Lo anterior luego de que el órgano electoral le ordenó a Sheinbaum deslindarse de la campaña, ilegal, que están realizando por todo México supuestos ciudadanos. Misma que se está realizando bajo el lema de “Es Claudia”.
No obstante, suponiendo que lo dos morenistas tuvieran razón en que pedirles respetar las leyes electorales es un “acto de censura”, se les olvida que esas leyes son producto de AMLO.
Las actuales leyes electorales y normativas sobre campañas y publicidad electoral surgieron de 2007, de los berrinches de AMLO. Esto cuando perdió las elecciones presidenciales y comenzó a exigir “piso parejo”.
En ese entonces, siendo parte del PRD, se presentaron medidas para la no intervención de funcionarios públicos en procesos electorales. Esto para que no hubiera ventajas con propaganda personalizada, como la de las bardas de “Es Claudia”.
En ese entonces, desde la representación de AMLO y el PRD, en voz de Horacio Duarte ante el INE, se reformaron los artículos 6 y 134 de la Constitución.
Si AMLO de verdad pensara que se trata de un acto de censura la orden emitida contra Sheinbaum, solo tendría que dar marcha atrás a las reformas electorales que él mismo impulsó junto al PRD en 2007. Mismas que exigió para que no se repitiera la propaganda personalizada que en ese entonces realizó Felipe Calderón.
Sin embargo, quitar lo que en aquel momento se aprobó, daría libertad a todo mundo. Así como a todos los medios de comunicación de poder expresarse libremente. Esto tener que tomar en cuenta los “procedimientos especiales sancionadores” del INE.
