En el ocaso del gobierno de Guillermo Padrés Elías –en Sonora–, aquí dijimos que la historia de ese panista no tendría un buen final.
En repetidas ocasiones sugerimos que el caso Padrés tenía todo para llevar al ex gobernador a la cárcel.
Ya fuera la construcción irregular de una presa, el grosero endeudamiento, las cuentas poco claras o los evidentes conflictos de interés… cualquiera que fuera el caso, existen los elementos y las evidencias para que Padrés viva una temporada en prisión.
En este contexto, no debiera extrañar que el Sistema de Administración Tributaria –SAT–, denunciara una serie de irregularidades ocurridas en el gobierno de Padrés.
De acuerdo con el fisco, el gobierno del panista habría perdonado el pago de impuestos a empresas vinculadas con funcionarios de su administración.
La información oficial habla de irregularidades por casi 100 millones de pesos.
No hace falta ser un genio para notar que algo ocurre en Sonora. Dicen los que saben que la autoridad ya le “puso la cama” al ex gobernador.
Es decir, que de un momento a otro, el señor Guillermo Padrés podría convertirse en un número más en el sistema penitenciario mexicano.
Lo lamentable del caso es que –como explicó a La Otra Opinión el Maestro Guillermo Noriega, presidente de Sonora Ciudadana–, todo indica que el grosero endeudamiento del gobierno de Padrés lo terminarán pagando los sonorenses.
Es decir, que con sus impuestos, los habitantes de Sonora serán quienes subsanen los malos manejos de su ex gobernador.
