Con base en una investigación del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas ‘Lazzaro Spallanzani’, en Roma, Italia, el COVID-19 también está presente en las lágrimas u otras secreciones oculares de los pacientes infectados, en consecuencia, también podrían ser una fuente de contagio.
Los especialistas hicieron tal descubrimiento al tomar una muestra ocular de un paciente positivo, que estuvo hospitalizado en enero, pero que también presentó conjuntivitis bilateral, aunque después lograron aislar el virus.
Tras darse a conocer estos resultados, la Organización Mundial de la Salud (OMS) solicitó más información al respecto. Por lo que Concetta Castellini, directora de la Unidad Operativa de Virus Emergentes de Spallanzani, detalló: “esta investigación muestra que los ojos no son solo una de las puertas de entrada del virus, sino también una fuente potencial de contagio”.
El análisis no ha terminado, pues en la siguiente etapa, se intentará descubrir si el virus continúa activo y con fuerza de infección incluso en las lágrimas. Sin embargo, otro hallazgo sugirió que aún cuando las secreciones nasales y no presentan la nueva cepa, las muestras oculares todavía la contienen.
Pero qué enfermedad más compleja es el coronavirus, sin duda será complicado enfrentarlo, pero eventualmente la humanidad sabrá cómo controlarlo.
Con información de Político MX
