¿Reivindica el PRI a “políticos” tras derrota de “tecnócratas”?

El Partido Revolucionario Institucional buscó innovar para no salir tan mal parado de la contienda electoral de este 2018 y eliminó sus candados estatutarios para apostar a candidaturas no militantes del bando de los “tecnócratas”.

Pero el PRI sólo consiguió una humillante derrota en los comicios del pasado 1 de julio a pesar de la ostentosa propaganda con la que adornaban el nombre de su candidato “no militante” y “bien preparado”: José Antonio Meade.

Ahora que el PRI se redujo a la tercera fuerza política, tras habitar Los Pinos en este sexenio, parece haber aprendido de su error y reivindicará a la militancia del bando de “los políticos”.

A Miguel Ángel Osorio Chong, uno de “los políticos” y la mano derecha de Peña Nieto durante su sexenio, le fueron arrebatadas sus aspiraciones presidenciales a pesar de que las encuestas lo favorecían. Ahora, será recompensado con la coordinación senatorial de la bancada del tricolor en la siguiente legislatura.

Igual que Osorio Chong, René Juárez Cisneros, encabezará la coordinación priista, pero en la cámara baja. Juárez, también del bando de “los políticos”, cabe destacar que fue llamado de forma tardía a presidir fugazmente el PRI nacional para intentar levantar la estancada candidatura de Meade.

Por lo tanto, en ambas cámaras el PRI será guiado por priistas con fuertes lazos ideológicos con el partido. Retomarán sus prácticas políticas que son garantía y disiparán el experimento evolutivo que los llevó al fracaso.

En la obra del sociólogo Max Weber, ”El político y el científico”, se describe con detalle el enfrentamiento entre ambos bandos, “el político” (también “los políticos” en el caso priista), representan las arraigadas ideologías tradicionales de un partido y “el científico” (“los tecnócnócratas” en el caso priista), representan la intelectualidad especializada.