Productores de cine no deben depender del presupuesto federal

 

El cine mexicano moderno puede presumir que ha tenido más éxito actualmente que en otros tiempos, pero para 2017 podría no ser así, y es que su impacto podría disminuir, de acuerdo con un estudio realizado por el Observatorio Público Cinematográfico.

La investigación apunta a que el recorte presupuestal 2017 al Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE), afectará directamente en la realización de películas nacionales, porque la mayor parte de éstas se produce gracias al estímulo que ofrece el gobierno federal.  

Las cifras arrojan que en el 2017 el IMCINE recibirá únicamente 275.6 millones pesos, lo cual implica una reducción en el financiamiento para el proceso de realización fílmica, que incluye producción, difusión, capacitación y distribución.

La cifra podría ser alarmante, pero en este medio pensamos que la reducción presupuestal no es motivo para que los productores crucen los brazos, ya que están obligados a recurrir a la iniciativa privada como una medida saludable y estable con el fin de continuar con sus proyectos.

En México la cultura es muy importante y no debemos depender de nadie, ni culpar al gobierno de responsabilidades propias. El cine debe salir adelante y no extinguirse como en otros periodos, por falta de recursos.