¿De qué hablarían el presidente Andrés Manuel López Obrador y el dueño de Grupo Carso, Carlos Slim, durante el desayuno que sostuvieron ayer en Palacio Nacional?
Un tema podría haber sido la resolución que está por tomar el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), mismo que podría representar para Slim cumplir su viejo anhelo de operar un canal de televisión.
Aunque de acuerdo con la Constitución el IFT es un organismo autónomo, el presidente de la República ha encontrado la forma de permear en él e influir en sus decisiones, por lo que desde Palacio Nacional se podría estar gestando un regalazo para Slim.
Mediante la resolución que será tomada de un momento a otro, el IFT podría otorgar a la empresa Claro Video, de Slim, la concesión para funcionar como canal de televisión.
El título de concesión de Teléfonos de México contiene un candado para que ni esta empresa ni alguna de sus filiares –como es el caso de Claro Video— pueda obtener la autorización para prestar el servicio de televisión.
Sin embargo, de acuerdo con algunos analistas, en el IFT buscan la manera de hacer a un lado dicho candado, de tal forma que Carlos Slim por fin pueda tener su propio canal de televisión.
Al dueño de Grupo Carso le fue muy bien durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, pues fue cuando el gobierno le vendió la empresa Telmex, con la cual mantuvo el monopolio de la telefonía en el país durante muchos años.
Pero en el gobierno de López Obrador también le ha ido muy bien. En julio del 2019 su grupo empresarial ganó la licitación para proveer de internet a todas las instituciones públicas del país, incluidos hospitales y universidades.
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El 31 de ese mes, un día después de que se dio a conocer el fallo, Slim acudió a Palacio Nacional a ver al presidente de la República a quien le llevó un regalo cuyas características se desconocen.
Carlos Slim es un asiduo visitante a Palacio Nacional. En mayo de este año, unos días después de la tragedia de la Línea 12 del Metro, el empresario se reunió con el presidente, con quien estableció el acuerdo para que su grupo rehabilite el medio de transporte colapsado a cambio de que no haya persecución penal por negligencia.
Ayer nuevamente Slim acudió a Palacio Nacional, ahora a desayunar con el presidente. Es inevitable asociar este nuevo encuentro de “amigos” con la resolución que en cualquier momento emitirá el IFT.
OFF THE RECORD
**MORENOS “REBELDES”
Además de Susana Harp, el senador José Ramón Enríquez se declaró en rebeldía porque Morena no lo hizo candidato a gobernador de Durango.
Es el caso también de la senadora Marybel Villegas, quien vio frustrados sus intentos de ser candidata al gobierno de Quintana Roo.
Está bien que respinguen contra el dedazo de Morena disfrazado de encuestas.
Pero a ver cuánto tiempo les dura la “rebeldía”; no vayan a ser de los que les soban la espalda y se calman.
**QUIRINO ORDAZ, RIP
Es prácticamente un hecho que España no otorgará su beneplácito para que el ex gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz, sea el nuevo embajador de México en aquel país.
El gobierno de España se ha tardado ya demasiado tiempo en otorgar el beneplácito, lo cual es interpretado por especialistas en cuestiones diplomáticas como un rechazo al ex gobernador. Por algo será.
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